Page 11 - Periódico La prensa v.6
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EL señor caído: mas que
un símbolo religioso
El Señor Caído de Girardota, es un ícono Normalmente la gente le pide sanar de al- voción total.
Más que un símbolo, El Señor Caí- guna enfermedad incurable o que le sea Más que un símbolo
do de Girardota, es parte funda- perdonado algún pecado imperdonable. El Señor Caído de Girardota es un ícono
mental de la historia del municipio. Peregrinación para los giradotanos, pues hace parte de
El Señor Caído, un cristo tallado en ma- Cada año, para Semana Santa, miles la historia y le da significado a una gran
dera, fabricado en Quito en 1799, del que de personas de distintas partes de An- parte de la cultura religiosa del municipio.
según sus devotos, diariamente se escu- tioquia hacen una peregrinación como Y su presencia no sólo fortalece el es-
chan milagros. Está ubicado a un costado ofrenda o penitencia para pedirle algo o píritu, sino también el turismo, por-
del templo Nuestra Señora del Rosario. darle las gracias por un milagro recibido. que genera empleo directo e indi-
Dicen que quien mandó a esculpir al Señor La Catedral de Nuestra Señora del Rosa- recto en épocas de peregrinación.
Caído fue el fundador de Girardota, el pres- rio de Girardota construida con ladrillo Para muchos fieles y habitantes, la presen-
bítero Manuel Londoño Molina, porque la macizo y con un toque francés durante 32 cia del Señor Caído explica lo que las pala-
inquisición iba a castigarlo por haber mal- años, es una de las más visitadas en Antio- bras no pueden explicar.
tratado a sus esclavos. quia durante los días de la Semana Santa.
Sus vestidos Se estima que entre la tarde del miér-
Tiene más de 85 vestidos, El Señor nun- coles y la noche del viernes Santo son
ca puede repetir un vestido durante cerca de 80 mil peregrinos que llegan
todo el año. Es limpiado con un acei- desde Medellín luego de un recorri-
te especial traído desde España que do que dura más de 5 horas; algunos
cuida la pintura y conserva el brillo. lo hacen caminando y otros de rodillas.
La mayoría de estos vestidos, han sido dona- La costumbre de la peregrinación es anti-
dos por los mismos feligreses, que encuen- gua y cada año llena las calles de Girardota
tran en este regalo, la manera de agrade- de devotos que quieren agradecer o hacer
cerle por los favores y milagros cumplidos. una petición, en ambos casos, con una de