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Y como su libro lo dice: “Tratándose de ne-
gocios era implacable, su rigidez no tenía
consideración” (p.100). Muchos girardo-
tanos lo vivieron en carne propia.
Así es que, bien ida la escultura de alguien
que solamente pensó en su beneficio eco-
nómico y bienvenidas las esculturas de
aquellos que dejaron todo su intelecto, su
trabajo y su vocación en el municipio, pen-
sando en favorecer a los demás.
Por: Marela Buriticá
La privatización de
lo público
Hoy es común ver oleadas de personas pi-
diendo a gritos la protección al derecho
Notas varias a la intimidad, como si fuera cosa nueva,
desconociendo que es un derecho que ha
existido desde años atrás y ha tenido ran-
La controversial go Constitucional desde el año 1991, por
escultura de Pepe lo menos en nuestro país, no obstante,
en riña con esta solicitud, a diario vemos
Sierra en Girardota como el usos de las nuevas tecnologías, re-
des sociales y otras, hacen más publica la
El Municipio de Girardota contrató a un vida de las personas, donde abiertamente
escultor para que hiciera dos monumentos publican preferencias políticas, religiosos,
por 198 millones de pesos, uno de Pepe deportivas y hasta sexuales, sin tener pre-
Sierra, el millonario empresario, y el otro sente - o siquiera el mínimo de conciencia-
de Alberto Aguirre, el intelectual dedicado en que se está volviendo público, lo que se
al arte. pide, se conserve privado.
La escultura de Pepe Sierra, hecha en El estado en cualquiera de sus modalida-
plastilina industrial y fundida por el des, no puede o debe, en aras de proteger
maestro Armando Arango, mide 2.50 cm y limpieza sobre la cual no hay que insistir, su seguridad y la de sus asociados, indagar
moldeada por el maestro Alexis Agudelo. porque esto iba con su naturaleza, y en to- en la intimidad de los mismos, pues de ma-
268 millones de pesos, costaron las es- dos sus actos surgía sin ningún esfuerzo. nera inmediata se pone presente y se de-
culturas de Pepe Sierra y Alberto Aguirre, Raro que entre los azares de tanto negocio fiende a muerte, el derecho a la intimidad,
ambos personajes ilustres de Girardota, no se haya levantado ni la sombra de una fabricamos entonces una doble moral,
que según la alcaldía anterior, fortalecían calumnia” (p. XVIII, Introducción). donde se vuelve publico sin tapujos lo mas
la memoria histórica del municipio. Puede ser que el trabajo a lo largo de los interior de la cotidianidad, pero cuando di-
cha información se usa con fines de segu-
Pero, ¿Quién era Pepe Sierra? años de Pepe Sierra, represente el esfuerzo ridad del estado, se quebranta de manera
Los dos personajes fueron exitosos en sus y la viveza en los negocios, pero esta razón delictual la misma.
respectivos oficios. Pero según muchos ha- no lo hace un prócer sino un exitoso millo- No es defendible desde ningún punto de
bitantes, Pepe Sierra sólo se dedicó a enri- nario. vista, que por razón alguna, más allá de la
quecerse a sí mismo y a su descendencia, Ídolos de barro protección del interés general, se violente
en cambio el artista Alberto Aguirre contri- No puede ser, que la razón para crear una el derecho fundamental a la intimidad, no
buyó con la memoria cultural del municipio. escultura sea la acumulación de dinero por por ello, se debe de perder la coherencia
El becerro de oro parte de unos pocos o la capacidad de pro- entre lo que se reclama y el cómo se actúa,
Según narra Bernardo Jaramillo Sierra, ducirlo. carece de toda autoridad rasgarse las ves-
acerca de su abuelo, en el libro Pepe Sie- Los girardotanos deben admirar a ilustres tiduras solicitando la protección a la inti-
rra, el método de un campesino millonario que hayan cambiado la vida de los demás midad, cuando la razón de ser de nuestras
(Bedout, Medellín, 1947). con sus intervenciones y proyectos, que vidas se convierte en quien tenga más likes
Y más adelante afirma: “Por todos sus ne- hayan construido un proyecto que marcó en tan renombrada red social, que por de-
gocios de campo, remates de rentas y com- positivamente la vida de miles de ciudada- más es la verdadera propietaria de nuestra
binaciones bancarias, cruza una estela de nos. información íntima y personal.
