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Bases psicopedagógicas de la enseñanza y del entrenamiento deportivo I – CFEM
gira en torno a él. No hay que entender el egocentrismo como algo malo. Simplemente les cuesta entender todo aquello que no gira en torno a ellos.
Otro factor importante que se va a evolucionando en esta etapa es la Conservación, que es la capacidad para entender que la cantidad no cambia cuando la forma cambia. Es decir, si el agua contenida en un vaso corto y ancho se vierte en un vaso alto y fino, los niños hasta los 4 años aproximadamente creerán que el vaso más alto contiene más agua debido solamente a su altura. Esto es debido a su incapacidad para entender la reversibilidad y debido a que se centran en sólo un aspecto del estímulo, por ejemplo la altura, sin tener en cuenta otros aspectos como la anchura. A medida que se van acercando a los 7 años, van comprendiendo el principio de la conservación y te dirán que ambos vasos tienen la misma cantidad de agua.
c) ETAPA DE LAS OPERACIONES CONCRETAS (de 7 a 11 años):
En este periodo el niño puede aplicar la lógica, es decir que empieza a conocer racionalmente. Así, pueden entender el concepto de agrupar, sabiendo que un perro pequeño y un perro grande siguen siendo ambos perros, o que los diversos tipos de monedas y los billetes forman parte del concepto más amplio de dinero.
Sin embargo, sólo pueden aplicar esta nueva comprensión a los objetos concretos (aquellos que han experimentado con sus sentidos). Es decir, los objetos imaginados o los que no han visto, oído, o tocado, continúan siendo algo etéreo para estos niños, y el pensamiento abstracto tiene todavía que desarrollarse.
Además, esta etapa está marcada por una disminución gradual del pensamiento egocéntrico, entendiendo que hay más personas a su alrededor y que pueden tener distintos puntos de vista (el mundo no gira en torno a ellos, sino que hay más personas) y por la capacidad creciente de centrarse en más de un aspecto de un estímulo.
d) ETAPA DE LAS OPERACIONES FORMALES (de 12 años en adelante):
Hablamos del pre-adolescente, el adolescente y el adulto. Es la etapa del pensamiento abstracto.
En esta etapa aparece la capacidad para formular hipótesis y ponerlas a prueba para encontrar la solución a un problema. Así, el individuo comienza a tener ideas propias. Incluso, puede llegar a razonar en contra de los hechos. Es decir, si le dan una afirmación y le piden que la utilice como la base de una discusión, es capaz de realizar la tarea. Por ejemplo, pueden razonar sobre la siguiente pregunta: ¿Qué pasaría si el cielo fuese rojo?".