Page 54 - Mi bebé y yo 345 - Diciembre 2021

BENEFICIOS DE LOS EJERCICIOS DE KEGEL
EMBARAZO
Y POSPARTO: DOS PERÍODOS CRÍTICOS
• Durante el embarazo, el parto y el posparto, el aparato genital de la mujer está sometido
a un esfuerzo extraordinario.
En consecuencia, el suelo pélvico suele acabar leve o gravemente dañado, y es muy común que
se relaje y pierda tono. Una de las principales consecuencias de esta pérdida de tono es la incontinencia urinaria, que se traduce en pequeñas pérdidas de orina y en la necesidad de ir al baño más a menudo.
Para evitar esta pérdida de tono, se pueden realizar los ejercicios de Kegel, que ayudan a tonificar los músculos de la zona y recuperar la elasticidad perdida.
• Durante el embarazo, los ejercicios de Kegel pueden ser necesarios en aquellas mujeres con un suelo pélvico debilitado. Sin embargo, el posparto es un momento clave para el suelo pélvico, pues está especialmente vulnerable: los músculos han sufrido grandes estiramientos,
los tejidos están distendidos, los órganos están volviendo a su lugar... Por eso, en los primeros meses,
es muy importante evitar al máximo las presiones sobre el suelo pélvico: cargar peso, estreñimiento, hacer deporte hiperpresivo, etc. Ya de
por sí, los excesos de presión sobre el suelo pélvico no son buenos, pero, en el posparto de una mujer, resultan fatales.
• Todas las mujeres deberían hacerse una valoración del suelo pélvico después de cada parto para saber cómo se encuentra
y poder buscar la mejor forma
de rehabilitarlo, si es necesario.
Los ejercicios de Kegel son los ejercicios por excelencia para tonificar el suelo pélvico. Sin duda, esta es la función más popular, pero no es la única.
• Uno de los beneficios más importantes relacionados con la práctica de los ejercicios de Kegel es el de dar vida a los músculos que conforman el suelo pélvico. Las contracciones de estos músculos generan movimiento,
y el movimiento aporta sangre
al propio músculo y a los tejidos que lo rodean. Las contracciones musculares revitalizan los tejidos, por lo que son una gran herramienta para combatir
la temida atrofia vaginal.
• Los ejercicios de Kegel bien realizados pueden convertirse en ejercicios de relajación,
proporcionando a los músculos, además, una buena capacidad contráctil y una buena elasticidad. • Estos ejercicios reconectan
a las mujeres con su suelo pélvico, siendo el cerebro el encargado
de reintegrarlo en el esquema corporal. Uno de los grandes problemas del suelo pélvico es que vivimos muy desconectadas de él y, muchas veces, solo
lo tenemos presente cuando
nos da problemas.
• Asimismo, hacer ejercicios
de Kegel con conciencia recuerda que el cerebro es el sistema nervioso, el que da movimiento
y sensibilidad. Hacer ejercicios
del suelo pélvico conlleva conectar más neuronas y, por lo tanto, implica más fuerza y más sensibilidad.
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