Page 694 - JUNIO 2024
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Tanta pasión que nos desborda cuando nos acercamos, tus labios son tan                      30
                  suaves, cuando se unen a los míos… ¿y me vuelves a preguntar si te cielo?

                  Sí mi amor, te cielo y quiero decírtelo todo el tiempo.


                  Te  lo  diré  siempre  pues  el  tiempo  es  nuestro,  de  nuestras  cartas,  de
                  nuestros sentimientos.


                  Este  amor  nuestro  siempre  es  un  bello  amanecer,  porque  cada  gesto o
                  palabra tuyo todo lo transforma todo.

                  -Amor mío-


                  El viento me trae tu aroma hasta aquí, mi rincón donde puedo sentir la
                  fuerza del cariño y todo el amor que me regalas a manos llenas todos los
                  días desde que llegaste a mi vida.


                  Y así, te voy soñando y mis manos no paran de escribir para poder soltar
                  tanto amor que tengo dentro de mí.

                  ¿Cómo se puede amar tanto como te cielo a ti?


                  ¿Cómo explicar al mundo el motivo de mi sonrisa?

                  Siempre estoy en la espera de que por fin nuestros corazones se encuentren
                  y pueda expresarte lo mucho que me importas y lo mucho que te cielo…


                  Eres una de mis razones de existir, la más importante…

                  Te cielo como si no hubiese nadie más que tú en el mundo. Para mí eres
                  una persona única y especial.


                  Te cielo porque eres toda bondad y muy especial.

                  Te ruego que hoy aceptes mi amor, en este momento quiero amarte y velar

                  por ti por siempre.

                  Sin ti me falta todo…

                  Nunca dejes de leer mis cartas, así como yo tampoco dejaré de leer las
                  tuyas que tanto bien me hacen.


                  Es un tiempo que se vuelve un poco extraño, donde el sol aparece y las
                  nubes se van, otras veces es, al contrario, pero aquí sigo yo con lo mío, con

                  lo nuestro, no dejando que las palabras se las lleve el viento.
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