Page 1085 - JULIO
P. 1085

Es  muy  cierto,  te  cielo  por  todo  lo  que  digo,  pero…  ¿es  razón                   6

                  suficiente para amarte?

                  Quise preguntárselo a mi espíritu, entonces me puse a meditar,
                  cuando vagando estuve por el mundo al fin me encontré con mi

                  espíritu, que por cierto lo encontré muy triste, pero feliz a la vez le
                  pregunté  qué  era  lo  que  le  pasaba,  el  sólo  me  dijo:  te  estuve

                  esperando sabía que llegarías a mí y gritó al cielo ¡gracias mi
                  amor! ¡gracias Dios!, me sorprendí totalmente.


                  Mi espíritu me dijo: “Sé a qué vienes, lástima que hayas venido
                  hasta acá para saber tu respuesta… ¡pues mira!...

                  La respuesta está frente a ti” … quedé atónito, no sabía a qué se

                  refería. "Sabes… por eso estoy triste, porque la respuesta camina
                  junto a ti cada minuto de tu vida", yo aún confundido miraba a

                  todos lados sin encontrar la respuesta, mi espíritu me sacudió de
                  los hombros y me gritó: “¡Mira a tu alrededor!”, entonces cuando

                  volví en sí, me di cuenta que la respuesta era mi espíritu, mi alma.

                  Desde que te conocí sentí que mi alma volvió a mí, sentí que esa

                  parte que había perdido regresaba a mi lado, sentí que desde que
                  te conocí soy el ser más completo de esta vida, hoy son muchos ya

                  los  días  de  estar  a  tu  lado,  días  de  infinita  alegría,  meses  de
                  locuras por verte, meses que parecían décadas, en verdad te doy
                  gracias por dejarme conocerte tal y como eres, por darme permiso

                  de explorar por cada rincón de tu vida y hacer mías las fantasías
                  más cohibidas.


                  Te doy gracias por dejarme saber que existes, por dejarme pensar
                  que  como  yo  nadie  podrá  amar,  por  darle  las  respuestas  más

                  obvias a las preguntas más complicadas sobre mi vida.

                  ¿Por qué te cielo tanto? Es muy simple mi amor… te cielo tanto

                  por dejarme reencontrarme conmigo mismo, con mi espíritu, con
                  mi alma.


                  ¿Por qué Dios te puso en mi camino?... sencillamente, porque sólo
                  alguien como tú podría llenarme de felicidad.
   1080   1081   1082   1083   1084   1085   1086   1087   1088   1089   1090