Page 1382 - JULIO
P. 1382

No me importará amor, esperar el tiempo que sea necesario, pues cada                        9
                  minuto, cada hora, cada día te cielo más y más, cada momento hace que

                  mi deseo por ti sea cada vez mayor.

                  Te cielo tanto…

                  El amor tiene tu nombre.


                  Hola mi amor:

                  Entre líneas y líneas voy tejiendo este sueño de amor que no termina nunca
                  de irse, y eso es porque tú y yo lo hemos querido así.


                  Desde hace casi un año habitas en mi corazón, en mi piel y en todo lo que
                  me rodea. Hoy me desperté queriendo decirte muchas cosas, esas que van
                  naciendo minuto a minuto y día tras día.


                  Hoy no quiero hablar de distancias, de esas que sabemos demasiado como
                  son y lo que se siente con ellas…

                  Hoy quiero hablarte de amor, de esa clase de amor que no nace un día

                  cualquiera, sino que se va formando con el tiempo.

                  Ese amor que sentimos nosotros y que tanto bien nos hace…

                  Cuando escribo estas cartas para ti es como que yo me libero de mí misma,

                  me recorre un deseo imperioso de decirte muchas cosas que, aunque suenen
                  o parezcan repetitivas, son las que guardo siempre para ti.


                  Siempre te encuentro cuando el sol se levanta y me asomo por mi ventana
                  pronunciando tu nombre.

                  Hoy no se parece a nada de lo de ayer, hoy es todo más fantasioso, hoy

                  juego con mis manos queriendo encontrar las tuyas a mi lado… pero no es
                  así,  estamos  lejos,  y  todo  el  tiempo  que  no  estoy  contigo  lo  paso
                  escribiendo mil cosas para enviarte y que puedas sentir en tu corazón que
                  cada día es una nueva esperanza para los dos.


                  Me faltas durante muchas estaciones, con tu ausencia siento tiempo de
                  lunas sin mucho brillo, y primaveras que parecen otoños.


                  Más tú eres interminable, y nunca cambias, eres perenne como la hierba,
                  real como el sol, amado y soñado por este corazón que solo ve a través de
                  ti.
   1377   1378   1379   1380   1381   1382   1383   1384   1385   1386   1387