Page 1739 - JULIO
P. 1739
Un postre que compartiremos una y otra vez hasta quedar saciados. 5
Porque pienso saciarme de ti, comerte, beberte y besarte hasta que la
noche nos arrastre al mundo de los sueños.
Y aún entonces, pienso soñarte y seguir recorriéndote y seguir
descubriendo nuevos sabores en ti; los mezclaré con los antiguos y
formaré un cóctel delicioso de pasión y deseo hasta que no podamos
con tanto fuego y la madrugada nos obligue a parar.
Hasta entonces, te espero.
Mi Esposa, mi Amiga y mi Amante, siempre tuyo, siempre mía, siempre
nuestro. Te cielo mi Begoña.
(Tú me haces amarte cada día más)
Siempre tuyo… siempre mía… siempre nuestro.
Desde mi rincón para ti.
Te miro y te veo, amor
Vida mía,
Te miro y veo ternura, me haces recordar lo que es la dulzura, lo que
es la belleza.
Te miro y me quedo paralizado en el espejo de tu mirada.
Te miro y gozo al mirarte.
Sé que no dejo de mirarte, que incluso me excedo en mirarte.
Pero tú sabes que te cielo, que todo es admiración, y que a la vez te
miro para darte gracias.
Te miro con incredulidad porque a veces pienso que no te merezco,
pero sabes que lucho cada día por conseguirlo.
Te cielo, y al mirarte el amor aumenta, te cielo, y no puedo dejar de
mirarte.
Si me algún día me prohíbes mirarte firmarás mi tristeza, porque
mirarte es mi sueño e incluso mirarte es mi religión.
Mirarte, ¿cómo no mirarte?, si poder mirarte es un sueño cumplido, si
mirarte es agradecerte, si mirarte es seguir soñando.