Page 1752 - JULIO
P. 1752

las  palmeras  se  agitan  en  ese  vaivén  como  si  danzaran  al  suave                   18
                  compás de la brisa, que adormece los sentidos...

                  ¡Y te hago todo mía!


                  ¡Qué inmensamente maravilloso es el sentir que me domina!

                  ¡Y cuánta placidez se siente entre tus brazos!

                  Y te cielo... te cielo con ese sentir pleno de hombre que se entrega a la
                  sensación más sublime y tierna... te cielo porque con tu suavidad de
                  mujer enamorada me elevas a los cielos cuando me dices "¡Te cielo!".


                  Sé  que  al  despertar  leerás  esta  misiva,  sólo  amor...  sólo  ábrela
                  despacio, porque en ella van miles de besos y suspiros... besos que
                  volarán hacia tus labios, tu rostro, tu piel... esos besos que nos damos
                  aún en lejanía, besos que raudos cruzan los mares y fronteras para
                  llegar a su destino.... dulces y suaves, nítidos y llenos del más puro

                  sentimiento que está en mi corazón que late ilusionado... diciendo en
                  su suave palpitar "¡Te cielo... te adoro!" Porque ¿sabes?...

                  ¡Eres mi mayor tesoro!

                  P.D. Sal a la ventana cielo mío... que la luna está en todo su esplendor

                  y  la  estoy  mirando,  diciéndole  quedito  tu  nombre...  como  en suave
                  suspiro... para que con su suave resplandor te diga lo que pienso...
                  ¡Que eres todo mía!

                  Mi gran amor

                  Amor mío:


                  No sé cuándo dejamos de ser dos para unirnos en uno solo, no sé
                  cuándo  empezó  mi  vida  a  ser  "nuestra  vida",  cómo  nos  fuimos
                  fundiendo el uno con el otro hasta formar un solo ser..."tú y yo" ahora
                  es "nosotros".


                  Y me gusta sentir esto tan maravilloso, es algo que va dejando rosas
                  en el camino, aunque también va dejando espinas, dolor que nos causa
                  la distancia.

                  Tú, eres mi amor, mi gran amor, ese que me hace pensar que nada

                  puede ser tan malo si estamos juntos, ese que toma mi mano y camina
                  junto a mí... no para sentirse importante, sino para llevarme a su lado
                  como su amor, su único y anhelado amor...
   1747   1748   1749   1750   1751   1752   1753   1754   1755   1756   1757