Page 502 - JULIO
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Y… la verdad, volvería a vivir todo lo vivido con tal de volver a encontrarte               15
                  frente a mí.

                  Me encanta todo de ti. Desde la forma en que me miras hasta esa manera

                  de entender lo que me pasa sin necesidad de una sola palabra.

                  Eres tan increíble que tengo miedo de perderte sin ni siquiera enterarme.


                  Que un día llegues y te des cuenta de que tal vez no te gusto tanto como
                  imaginabas. No lo sé.

                  Simplemente, me rechiflas. Adoro pasar tiempo contigo, hacer de cada día

                  algo diferente por mucha rutina que se nos eche encima.

                  No pasa nada. Podemos ser felices en nuestro mundo repetido mientras
                  nos tengamos el uno al otro. De eso estoy seguro.


                  Gracias por el amor

                  Es mirarte  y comprender que no quiero  amar a nadie más. Es tener la
                  certeza de que estoy donde quiero estar y que, por una vez, todo parece

                  perfecto.  Ya  no  duele  el  ayer  ni  asusta  el  mañana,  solo  importa  este
                  presente contigo en el que me regalas la vida que antes me faltaba.

                  He aprendido a ser feliz así, con todo lo que tú me das y con todo lo que

                  no  sabía  que  yo  tenía  por  vivir  siempre  queriendo  más.  He  dejado  de
                  buscar en las estrellas una luna que eclipse todo lo demás y aprendido a
                  apreciar lo bonito de las cosas pequeñas, lo innecesario de todo aquello que

                  antes creía me daría la felicidad.

                  Ahora sé que felicidad eres tú. Llegaste para cambiarme la vida y no sabes

                  cuánto te lo agradezco. Me abriste los ojos, quitándome esa ceguera auto
                  impuesta que no me dejaba ver más allá de mis propias manos. Menos mal
                  que las uniste con las tuyas, entrelazando así este presente solitario que
                  yo vivía con toda esa locura que te envuelve.


                  Por eso, gracias.

                  Gracias por ser como eres, por elegirme.


                  Gracias por dejarme ser contigo, sin egoísmos ni heridas que nunca sanan.

                  Gracias  por  los  viajes,  por  las  risas,  por  ser  la  luz  que  ahuyenta  las
                  tinieblas.
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