Page 599 - JULIO
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Porque mi corazón está enamorado de ti: cada día me enamoro                                 10

                  más de ti y de lo tuyo, ahora lo estoy más que nunca.

                  Testigo de mi amor es el ritmo de las suaves melodías que en esta
                  noche  te  dejo  junto  a  estas  letras  que  buscan  recordarte  cuán

                  profundo y sincero es esto que por ti siento.

                  Mi amor eres sólo tú, nadie más, sólo tú. Hasta pronto, fuente de

                  mis sueños e ilusiones.

                  Piensa en mí en esta noche, así como yo pienso en ti, para juntos

                  estar  en  sinfonía  (por  ahora)  sin  importar  cuán  lejos  nos
                  encontremos, porque la distancia ya no existe para nosotros; pues
                  con sólo cerrar mis ojos te traigo hasta mí y te abrazo para que

                  nunca te vayas de mi lado, como me gusta la noche en la cual
                  puedo hacer todos mis sueños una realidad.


                  Te cielo mi amor, mi único amor. Siempre en mí, en cada noche.

                  Siempre en mí, en pensamientos. Siempre en mí, en mi corazón.


                  Siempre en mí, amor de mis sueños. Te cielo tanto…

                  DESDE QUE TE CONOCÍ


                  Desde que te conocí sentí que mi alma volvió a mí, sentí que esa
                  parte que había perdido regresaba a mi lado, sentí que desde que

                  te conocí soy el ser más completo de esta vida.

                  Hoy son muchos ya los días, las semanas, los meses, de estar a tu
                  lado,  meses  de  infinita  alegría,  semanas  que  parecían  décadas

                  cuando no te veía, días de locuras por verte...

                  En verdad te doy gracias por dejarme conocerte tal y como eres,

                  por darme permiso para explorar por cada rincón de tu vida y
                  hacer mías las fantasías más cohibidas.


                  Te doy gracias por dejarme saber que existes, por dejarme pensar
                  que  como  yo  nadie  podrá  amar,  por  darle  las  respuestas  más
                  obvias a las preguntas más complicadas sobre mi vida. ¿Por qué

                  te cielo tanto? Es muy simple, mi amor... te cielo tanto por dejarme

                  reencontrarme conmigo mismo, con mi espíritu, con mi alma.
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