Page 893 - JULIO
P. 893
Siempre tuyo, siempre mía, siempre nuestro.
12
Desde mi rincón para ti.
Tu amor en la distancia.
Mis letras
Incontables son nuestras cartas, ¿verdad?
No importa si son cientos, sólo así haremos historia con nuestro amor, y nos dará
fuerzas para seguir en este inquieto y difícil pero no imposible camino.
Mucho tiempo ya estoy en tu vida, así como tú estás en la mía. Siguen
germinando letras para ti, cartas que van llenas de muchas emociones,
sensaciones y también melancolías; más sigo empeñada en este amor, sigo
persiguiendo sueños que un día espero alcanzar.
No se cansa mi pluma ni mucho menos mis ganas de escribirte... por ahora sólo
son papeles que vuelan por la red para llegar hasta tú corazón, donde sé que
me esperas, donde sé que puedo acostarme y dormir tranquila, pues tú cuidas
mis sueños.
Nuestra distancia es grande, pero más grande es este amor que a ti profeso.
Nada empaña este cariño, ni los calendarios, ni los astros, ni las estaciones que
pasan, porque mucho más hermoso es todo lo que tú y yo tenemos; y esas
espinas que llaman "distancias" dejan de serlo cuando me acerco a ti.
Mi amor, ya sabes que a mí sólo me basta cerrar los ojos para estar cerca, hasta
te puedo respirar, te puedo sentir con sólo pensarte.
Mi amor... mi soñado amor; sé que muchas veces la tristeza te cubre el rostro,
más te pido que no lo hagas porque nada cambia en mí, te cielo más que nunca.
Ya son muchas mis letras y no las cuento, porque empapelaría toda una
biblioteca con mis cartas, fieles testigos de este sentimiento que a ti te reservo,
porque sólo son para ti: cartas cargadas de sentimientos sinceros y de
esperanza...
¡Cuánta falta me haces, amor mío!
A veces también siento que todo mi mundo se cae, pero cuando tus cartas se
cruzan con las mías sé que todo ha valido la pena, que todo lo que soñamos se
hará realidad.
No te pongas triste, no desesperes: algún día, no sé cuándo, tus ojos se mirarán
en los míos y será todo lo que veas hasta que viejos estemos, porque este amor
es para siempre.
Así, media dormido, te voy escribiendo y te digo cuánto te cielo.
¿Recuerdas cuando dije que te amaría? Que no era un amor cualquiera, era un
amor para la eternidad.