Page 115 - El Necronomicon
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Pero el Este no los conoce,
Y el Oeste tampoco los conoce.
Son una mano que aferra el cuello
Pero el cuello no los conoce
Y el hombre tampoco los conoce.
Sus palabras no están Escritas,
Sus números son Desconocidos,
Sus formas son todas las Formas,
Sus moradas,
Los lugares desolados donde se realizan sus Ritos.
Sus moradas,
El acoso a un hombre donde se ha ofrecido un sacrificio.
Sus moradas,
Las tierras aquí,
Las ciudades aquí,
Y las tierras entre las tierras,
Las ciudades entre las ciudades,
En espacios que jamás caminara un hombre.
En KURNUDE,
El país del que ningún viajero retorna.
En EKURBAD,
En el altar del Templo de los muertos.
Y en Gl UMUNA,
En el pecho de su Madre,
En los Cimientos del CAOS.
¡En el ARALIYA de MUMMU-TIAMAT
Y en los Pórticos
De IAK SAKKAK!
¡ESPÍRITU DEL AIRE, RECUERDA!
¡ESPÍRITU DE LA TIERRA, RECUERDA!
III
SOBRE LAS GENERACIONES OLVIDADAS DEL
HOMBRE
¿Y no fue el hombre creado de la sangre de KINGU,
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