Page 111 - DIC BORRADOR

descansando bajo el ombligo de Dania mientras se pierde en su femenidad,

suavemente la besa y lame su sexo mientras mueve el diminuto hielo en su
abdomen bajo, hasta que este se derrite dejando como un bello espectáculo los

hilos de agua que caen por su cuerpo. Uno de esos hilos cae al sexo, la fría
sensación la excita y aún más cuando la lengua estimula con suave vibraciones

el clitoris. La penetración de su sexo por los curiosos dedos de él solo aceleran

un inminente orgasmo que comienza a apoderarse de su cuerpo.

- ¡¡¡Aahhhhhh Dios!!! - Exclama extasiada por la placentera sensación de

correrse ante las tocaciones de su devoto amante. Pasan los minutos y Daniel
se coloca a su lado acariciándola, la besa y de un salto se posa sobre su

cuerpo desnudo. Aún sin terminar de digerir el orgasmo él la penetra

suavemente, y comienza a hacerle el amor con delicadeza. Besa sus senos
que despiertos lo señalan con los bellos y duros pezones como el causante de

aquella placentera sensación que asaltaba sus sentidos.

Comienza a acelerar las arremetidas, las amarras la dejan desprotegida ante

aquella firme intención de hacerla correrse de nuevo, oprime cualquier
intención de detener aquel futuro y simplemente se entrega gimiendo hasta que

los espasmos en su cuerpo la hacen retorcerse de placer cuando llega al

orgasmo, solo momentos después él eyacula acusando el éxtasis.
Rápidamente saca su pene y se acuesta a su lado, pero lejos de terminar,

oculta su mano en su entrepierna penetrándola con los dedos y comienza a
masturbarla. Los gemidos vuelven a envolver el ambiente. Sin pasar mucho

tiempo un nuevo orgasmo la deja rendida y eyacula dejando la cama y la mano
de Daniel empapada de sus fluidos.