Page 296 - Jesús: el camino, la verdad y la vida
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PILATO Y HERODES CONSIDERAN INOCENTE A JESUS
MATEO 27:12-14, 18, 19 MARCOS 15:2-5 LUCAS 23:4-16 JUAN 18:36-38
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Jesus no trata de ocultar a Pilato que realmen- sacerdotes principales y los ancianos siguen
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te es rey. Sin embargo, su Reino no es una ame- gritando, Pilato le pregunta a Jesus: “¿Es que
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naza para Roma, pues le dice: “Mi Reino no es no oyes cuantas cosas testifican contra ti?”
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parte de este mundo. Si mi Reino fuera parte (Mateo 27:13). Aun ası, Jesus se queda calla-
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de este mundo, mis ayudantes habrıan peleado do. A Pilato le sorprende la serenidad que Jesus
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para que yo no fuera entregado a los judıos. muestra ante las absurdas acusaciones de los
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Pero la realidad es que mi Reino no es de aquı” judıos.
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(Juan 18:36). Ası que Jesus deja claro que tie- Al oır a los judıos decir que Jesus “comen-
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ne un Reino, pero no es parte de este mundo. zo en Galilea”, Pilato descubre que Jesus es
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Pilato no se queda satisfecho con la respues- galileo. Ası que se le ocurre una idea para li-
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ta de Jesus. Por eso le pregunta: “¿O sea, que brarse de la responsabilidad de juzgarlo. Pila-
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tu eres rey?”. Entonces Jesus le dice que ha lle- to sabe que Herodes Antipas, el gobernador de
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gado a la conclusion correcta: “Sı, tu mismo es- Galilea, ha venido a Jerusalen en esta epoca de
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tas diciendo que yo soy rey. Para esto he nacido la Pascua. De modo que decide enviarle a Jesus.
y para esto he venido al mundo: para dar testi- Fue Herodes Antipas, hijo de Herodes el Gran-
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monio de la verdad. Todo el que esta de parte de, quien mando que le cortaran la cabeza a
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de la verdad escucha mi voz” (Juan 18:37). Juan el Bautista. Y, cuando mas tarde escucho
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Poco antes, Jesus le habıa dicho a Tomas: “Yo que Jesus estaba haciendo milagros, le preocu-
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soy el camino, la verdad y la vida”. En esta oca- po que Jesus pudiera ser Juan resucitado (Lu-
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sion, hasta Pilato llega a saber que Jesus vino a cas 9:7-9).
la Tierra para dar testimonio de la verdad, en Herodes se alegra ante la posibilidad de ver
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concreto, la verdad sobre su Reino. Jesus esta a Jesus. Y no es porque quiera ayudarlo o este
dispuesto a ser fiel a esta verdad aunque le interesado en averiguar si lo que se dice contra
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cueste la vida. Ahora Pilato le pregunta: “¿Que el es cierto, sino por simple curiosidad y por-
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es la verdad?”. Pero no espera la respuesta, que espera “verlo hacer algun milagro” (Lucas
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pues considera que ya ha oıdo suficiente para 23:8). Pero Jesus se niega a satisfacer su curio-
juzgar a este hombre (Juan 14:6; 18:38). sidad. De hecho, cuando Herodes lo interroga,
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Pilato se dirige de nuevo a la multitud que Jesus no le responde. Eso decepciona a Hero-
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esta esperando fuera del palacio. Al parecer, Je- des, y el y sus soldados lo tratan “con despre-
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sus esta junto a el. Entonces Pilato les dice a cio” (Lucas 23:11). Lo visten con una ropa es-
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los sacerdotes principales y a los que estan con plendida y se burlan de el. Luego, Herodes se lo
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ellos: “Yo a este hombre no lo encuentro culpa- envıa de vuelta a Pilato. Aunque los dos habıan
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ble de ningun delito”. Enfurecida por estas pa- sido enemigos, ahora se hacen buenos amigos.
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labras, la multitud grita: “Alborota al pueblo en- Cuando Jesus regresa, Pilato reune a los
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senando por toda Judea; comenzo en Galilea y sacerdotes principales, a los gobernantes ju-
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ha llegado hasta aquı” (Lucas 23:4, 5). dıos y al pueblo, y les dice: “Lo interrogue de-
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El fanatismo ciego de los judıos debe de lla- lante de ustedes y no encontre ninguna base
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mar la atencion de Pilato. Por eso, mientras los para las acusaciones que presentan contra el.
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