Page 78 - VEJIGANTES FINAL JUNIO 2013 MASTER PARA TIENDA EC1
P. 78
Francisco Arriví VEJIGANTES
CLARITA
(Sin mirarla.)
Dime.
MARTA
Voy al bar. Si Bill llega mientras tanto, dile que preparo unos
cocteles. (Se dirige al claro de la derecha y se detiene poco antes. De espaldas
a Clarita.) Espero que lo recibas amablemente.
CLARITA
(Volviendo la cabeza.)
Tranquilízate. He resuelto el rompecabezas. Ahora puedo recibirle.
Marta la mira un instante. Desaparece por el claro de la izquierda.
Clarita se dirige lentamente al claro del fondo y contempla la noche
de luna a través de la reja; luego, mira hacia el cuarto de Mamá Toña.
Se vuelve y se dirige a la mesa del centro. Toma el disco de Mamá Toña y
se cerciora de su título. Abre la radiola y coloca el disco en el plato. Pone
a funcionar el mecanismo y cierra la tapa. Se escucha el golpear sobre las
timbas, luego las voces de los timbaleros:
Joyalito, ay, Joyalito,
Joyalito, ay, Joyalito,
te olvidaron en el puente.
Clarita se sienta en el sofá, mira hacia la radiola y luego hacia el
jardín.
Se mantiene estática. Se desdibuja el escenario. Primero, la sala; luego,
la reja y el jardín. Imperan las sombras. Se escuchan el disco entre ellas:
Joyalito, ay, Joyalito,
Joyalito, ay, Joyalito,
te olvidaron en el puente.
Las paredes de la sala se convierten lentamente en un esquema
translúcido, a través del cual, desaparecida la reja, surge la visión magnífica
de la playa de Luquillo: columnata de palmas de la derecha hacia el fondo
y franja de mar zafireo y playa dorado a la izquierda. La luz diamantina
de la mañana enciende un delirio de relumbres en nubes gigantescas y
centellea sobre el acero verde de las palmas y la risa blanca de las olas.
78