Page 134 - METAFÍSICA 4 en 1 edicion 1 y 2
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divino seamos los únicos que nos hemos atrevido a crear la discordia, el odio, las guerras,
el hambre, el desorden, el libertinaje y la maldad. Y vamos a comprobar este alegato:
Por debajo del hombre están los animales, las aves, los insectos. No tienen libre
albedrío. porque no razonan siquiera. Son casi autómatas gobernados por un espíritu
superior llamado "Espíritu Grupo". Los hay para cada especie y éstos no se apartan de su
Principio Fundamental, Amor, Vida
y Armonía y Luz.
Más arriba del hombre están los Ascendidos Maestros, la Hueste Angélica y los Seres Cósmicos que no
se apartan jamás de su Principio Fundamental de Amor, Vida, Armonía y Luz. En la misma humanidad hay
seres adelantados que al nomás conocer a su Amada Presencia y darse cuenta de lo que acarrea el libre
albedrío, no piden otra cosa que la Amada Presencia asuma el mando y que se cumpla la Voluntad Divina y
no la propia.
Por esto del libre albedrío es que nuestra Tierra tiene 50 siglos de atraso. Ella está
atascada en un mismo punto. No retrocede, pero no avanza ¿Y por qué? ¿Qué fue lo que
interrumpió nuestra marcha? Ya se los voy a decir.
Ustedes saben que el hombre tiene varios cuerpos, uno por cada plano de vida. Estos
planos son siete, cada uno con siete subdivisiones. Pero nosotros no vamos a tratar sino de
tres de estos planos, o sea, el Plano Físico, el Plano Astral y el Plano Mental. Mejor dicho el
Cuerpo Físico, el Cuerpo Astral y el Cuerpo Mental. De éstos, el Cuerpo Físico se compone
de dos partes muy marcadas. La parte densa formada por sólidos, líquidos y gases, y la
parte que no vemos, formada por cuatro tipos de materia muy fina. A esta parte se le llama
el Doble. El Doble Etérico. No confundir con el Plano o Cuerpo Etérico que es parte de El
Plano Mental. El Doble es idéntico al Físico pero es como una niebla, de color grisáseo, es
más grande que el físico, o sea, que sobresale del Físico como cuatro centímetros porque
su cometido es el de absorber los Rayos solares y distribuir la vitalidad por todo el Físico.
No es difícil verlo. Se le llama el Aura de Salud porque cuando la persona está sana es
brillante y cuando está enferma luce opaca. Los hindúes le dicen Prana a la vitalidad.
Este Doble no debe jamás separarse del cuerpo denso. El no debe usarse para
clarividencia ni para salir de viaje en el espacio. Es el protector y suministro vital del cuerpo.
Sin embargo hay cosas anormales que lo hacen separarse un poco, como un golpe muy
fuerte, un acceso de furia, una terrible emoción, la desesperación, la mala salud, las drogas
y la auto-hipnosis. Esto causa una condición desastrosa llamada mediumnidad. La
mediumnidad es una anormalidad, es pues una enfermedad. Es un desorden. Sí, mis hijitos
e hijitas, la mediumnidad no es un don del cielo ni una prueba de altura. Es negativa y no se
debe practicar. Hay que curarla porque es una enfermedad psíquica.
Ahora, como la humanidad tiene a menos controlar sus arranques emocionales
Positivos o Negativos, o sea, de cólera y pena, como de placer, exponiéndose a todo
género de accidentes y enfermedades, toda vive expuesta a la separación del Doble
Etérico. Hay ciertas sectas (que no necesitamos nombrar) que enseñan a todo el Planeta a
entrar en trance mediumnímico por medio de ritos, relajaciones, cantos monótonos que
inducen el auto-hipnosis, y esto separa el Doble del cuerpo denso. En toda sesión
espiritista la médium termina en profundo agotamiento. Se le ve demacrada, jadeante, sufre
palpitaciones terribles. Todo porque al separarse el Doble del físico priva a éste de la
vitalidad. Si ocurre algo que asuste al médium, éste moriría. Ninguna persona de buen
sentido debe jamás practicar ni la mediumnidad, ni el espiritismo, porque es peligrosísimo.
Por otra parte, el médium es un instrumento pasivo de influencias ajenas. Los espíritus
de altura jamás se acercan a un cuerpo impuro. El medium-nismo es el antítesis del
adoptado. Generalmente son los espíritus muy bajos de los subplanos astrales los que
vienen para aprovecharse de la vitalidad del médium. Si son los espíritus de la naturaleza,
no pueden soportar las emanaciones humanas. No se acercan. Los espíritus burlones les
encanta mistificar, engañar y hacer papeles de grandes figuras. La persona inteligente los
puede desenmascarar. Casi siempre los mensajes que dan son leídos por los mismos
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