Page 146 - METAFÍSICA 4 en 1 edicion 1 y 2
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necesitas, pues siempre prefieren su nido anterior a la nueva casa, hasta que se dan cuenta
de que en realidad están mucho mejor allí porque se sienten importantes, necesarios, son
nuevos y se enseñorean por ser superiores al ambiente. "Como es arriba es abajo, como es
abajo es arriba". Después que tienen un tiempo habitando su nuevo ambiente, ya uno
puede recordar y hasta hablar de un suceso pasado, sin que salgan a presentarse esos
viejos fantasmas.
Y bien, se me ha comunicado un conocimiento muy importante. Y es que la Conciencia
Crística, o sea, el Ser Crístico de todos los humanos, El Cristo, en una palabra, no es un
cuerpo, es una conciencia. Ya saben lo que les enseñé, que "las conciencias" tienen vida e
inteligencia. La Conciencia Crística o El Cristo nuestro, existe porque en el comienzo de
nuestra creación por el Creador, lo que funcionaba en nosotros era esa Conciencia pura y
bella. Ella ha quedado en las altas esferas, esperando que nosotros lleguemos a reunimos
con ella. Se llama "El Cristo" y todos estos Cristos se dirigieron al Tribunal Kármico que está
compuesto por siete entidades de sabiduría y le pidieron permiso para hacer presión en
cada uno de nosotros, limpiándonos de todas las cristalizaciones para poder evolucionar
rápidamente, quitando y barriendo del mundo todo lo negativo y estableciendo el Reino de
los Cielos en la Tierra lo más pronto posible, pues La Tierra está en un peligro grande de
destruirse por falta de luz, como ustedes ya saben. La Tierra está, en lo que llaman los
Maestros, un estado recalcitrante y es que los humanos no hacen caso, no quieren cambiar,
por más que hacen nuestros guías y seres de luz, y los Angeles y nuestros Cristos están
sufriendo, cosa insólita, como ustedes comprenderán. Ese es un estado de caos universal
que amenaza. El Tribunal Kármico primero dio permiso para que 2.000 Cristos hicieran la
prueba. Somos diez millones de seres humanos entre encarnados y no encamados, y
solamente tres mil millones están encamados a la vez en la tierra. La prueba dio resultado y
el permiso fue aumentado a 20.000, luego aun millón y luego a diez millones.
El motivo por el cual no se pudo dar el permiso a todos los Cristos al mismo tiempo es el
siguiente:
Si toda la humanidad prorrumpe de pronto en una sed devoradora de bien y de actuación
correcta y justa en el actual estado de ignorancia en que se encuentra, respecto a las leyes
inmutables de mentalismo, correspondencia, vibración, Polaridad, Ritmo, Causa y Efecto y
Generación, los pobres, desesperados por saber cómo comportarse, viendo los efectos
devastadores de sus actos, sin podérselos explicar, no encontrarían a nadie a quien acudir,
para que los instruyera y se volverían locos, se suicidarían, etc. Primero había que preparar
a los pastores, los instructores y directores espirituales en todos los países. Ustedes son los
futuros Pastores que me apoyarán y que podrán explicarles, consolando a todos aquéllos
que van a venir a nosotros buscando auxilio en sus angustias, porque angustias horribles
van a sentir todos aquéllos que de pronto serán limpiados de siglos de suciedades, por sus
Cristos. Suciedades que los atormentaran día y noche. Todas las noches pídanles a sus
Cristos que las lleven durante el sueño a los Templos de Instrucción de las Luces, en
especial al Templo de la Luz Violeta, pues el Maestro Saint Germain dice que está
dispuesto a repetir, cuantas veces sea necesario, la instrucción respecto a la Llama Violeta
que será milagrosa contra los males de la Era.
Terminaré esta carta con las palabras del Lord Divino, quien era Instructor Mundial antes
de que ocuparan ese oficio Jesús de Nazaret y Kuthumi juntos. Dice así: "En el nombre de
mi propia vida y por el poder del ímpetu de mis miles de centurias oficiando, Yo cargo
vuestros mundos sensorios con la convicción de que sus Cristos son seres vivientes,
inteligentes, más interesados en vosotros que vosotros mismos, ya que os han dado el
aliento y os han sostenido durante millones de años con la esperanza de ver la oportunidad
de exteriorizar vuestro Plan Divino ¿No queréis aceptar esto y permitir que este Dios a
través de ustedes cumpla su propio patrón de perfección, su maestría y dignidad, su
equilibrio y belleza, su armonía y libertad?"
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