Page 36 - Revista AonHealth No27 (Julio-Septiembre 2020)

1. No empieces justo después de levantarte
Necesitas una rutina de inicio para prepararte para el trabajo. Puedes optar por bañarte o desayunar antes de comenzar y tomarte unos minutos para enfocarte una vez que decidas sentarte a trabajar. Prepárate, levántate un poco temprano y haz todo como si fueras a salir.
2. Acomoda tu casa
Entre esa rutina de la mañana puedes acomodar tus cosas, dejar tendida la cama y mantener
todo en orden para que no tengas ni una sola distracción o sentimiento de que no estás haciendo suficiente. Sirve para mantener el espacio limpio, lo cual dejará despejada tu mente para comenzar y enfocarte en tu trabajo.
3. Ten un área de trabajo
Puede ser un escritorio, o la sala más silenciosa de la casa, o en realidad cualquier espacio, siempre y cuando sea cómodo y te quedes en ese espacio durante tus horas de trabajo. Es muy importante que no te duermas o que no hagas otras actividades en esos espacios. Si estás acompañado, pide menos distracciones o un espacio alejado.
4. Nada de televisión, ni plataformas streaming
Como mencionamos, no es una buena idea tener tentaciones. Y es que con el sentimiento hogareño puede ser inevitable, pero por eso hay que mantenerse alejado de la T.V. hasta que haya terminado el día de trabajo. Por otra parte, hay personas a las que les sirve ese ruido externo. Si eres uno de ellos, crea playlist de música que te ayuden a relajarte y mantenerte concentrado.
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