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embarque, es el más rendidor
pesquero de la especie desde que
tenemos memoria.
El piso de barro, situado cerca del
veril de piedra del gran promon-
torio de La Ballena es el pesquero
por excelencia, más allá de que
la brótola también habita otros
reductos del litoral maríti mo,
también clásicos, como el puerto
de Piriápolis, José Ignacio y los
pesqueros de embarque cercanos
al mismo.

El año pasado, por ejemplo, en
Cuchilla Alta, mezcladas con
grandes pescadillas, pescamos
enormes brótolas, en una acti vi-
dad sorprendente.
Cabe decir que por su condición
costera y por su alto valor en los
mostradores, la brótola es una
especie que recibe alta presión
de pesca comercial, lo que hizo
que en los últi mos años la mag-
nitud de los cardúmenes se haya
reducido.

Sin embargo, en la últi ma tem-
porada, vimos como una suerte
de refl orecer de la especie en
Piriápolis, Montevideo y, por
supuesto, Punta Ballena.
HABITOS DE LA ESPECIE

Más de una vez oímos decir que
la brótola es habitante exclusivo
de lechos de barro, cosa que,
hemos comprobado infi nidad de
veces, no es así.

Es verdad que la pescamos en
los lechos de barro pegajoso de
muchos pesqueros, pero también
las hemos pescado en lechos de
piedra, ya sea en las resti ngas de
Garzón, las de Los Bajos del Solís,
en Cumberland e incluso en luga-
res tan atí picos como el lecho del
lado sur de la Resti nga del Pájaro,
en Carrasco; siempre sobre fi rme
piso de piedra.
PESCA & TURISMO ׀ REVISTA Nº 221, Agosto 2019 ׀ 20 ׀