Page 35 - Pesca y Turismo 221

y acarreo de bártulos demandan
demasiado ti empo.
Por eso, cuando llegamos a un
lugar y el agua no está clara, lo
mejor es no perder el ti empo y
seguir camino.
Por lo regular, si el agua está ta-
pada en balnearios como Guazu-
birá, Biarritz, Cuchilla Alta, Santa
Ana o Balneario Argenti no, esta-
mos obligados a seguir camino a
los pesqueros de la Ensenada del
Potrero, donde difí cilmente en-
contremos el agua tapada, salvo
que se hayan sucedido vientos
fuertes del norte durante dos o
tres jornadas.
Claro que si estas condiciones
persisten, seguramente sea una
mala jornada de pesca, pero le
tenemos mucha fe a Sauce u
Ocean, ya que difí cilmente nos
dejen sin pescar.
Pues bien, luego de ver el agua
clara, parti cularmente surcada
por veloces pingüinos, armamos
dos cañas cada uno y nos dispusi-
mos a disfrutar de un maravilloso
día de pesca de pejerreyes.
Y así fue; al principio picaron
unos cuantos cortones, hasta que
sobre el mediodía se intensifi có
la acti vidad.
Ustedes verán que cuando pican
pejerreyes chicos, sobretodo en
estos pesqueros oceánicos, es
porque la acti vidad es muy poca;
casi nula.
Sin embargo, salvo condicio-
nes muy adversas de bajante o
creciente, llegado un momento la
pesca se comienza a manifestar
con suma generosidad, al punto
de que llegado un momento se
hicieron parti cularmente frecuen-
tes los dobletes de pejerreyes
sumamente combati vos.
Recordamos, anecdóti camente,
que estábamos pescando muy
mal, hasta que un amigo nos
llamó sobre poco más de las 11
de la mañana y de un momento
al otro debimos cortar la comu-
PESCA & TURISMO ׀ REVISTA Nº 221, Agosto 2019 ׀ 37 ׀