Page 133 - CONFLICTO DEL ATLANTICO SUR E ISLAS MALVINAS
P. 133
“MIS VIVENCIAS EN EL CONFLICTO DEL ATLANTICO SUR E ISLAS MALVINAS 1982”
Al ingresar al Gimnasio pude percibir los ánimos bastantes
caídos y afectados por la pérdida sufrida por nuestro
Escuadrón, y eso que no sabían lo de Río Grande; no fui
a cenar, sólo quería escribir un poco y acostarme cuanto
antes, que este día termine pronto.
22-MAY-1982: ¡QUÉ FORMA DE DESPERTARNOS!...
Me desperté sobresaltado con el tableteo de
ametralladoras y detonaciones de otro tipo de armas.
El ambiente dentro del Gimnasio era de alta tensión, aquel
que poseía armamento se aferró al mismo dada las
circunstancias por el peligro de bombardeo o ataque de
comandos; y como los mecánicos, por sus tareas
específicas no están provistos de armamento de mano, se
proveyó a una cierta cantidad de ametralladoras Halcón, a
algunos suboficiales y civiles, dándose una breve
instrucción de utilización pues la mayoría desconocíamos
como se utilizaban.
En mi caso no tenía ninguna instrucción de tiro pues no
había realizado el servicio militar, pero a la altura de los
acontecimientos era necesario saber defenderse y a la vez
tratábamos de vestirnos rápidamente.
Transcurridos los minutos estas detonaciones fueron
apagándose, nos recostamos vestidos sobre nuestros
catres, todavía era muy temprano, pero nadie pudo
conciliar el sueño, estábamos con los nervios en tensión.
Más tarde fuimos a desayunar a la parrilla y allí nos
enteramos que había sido una falsa alarma: los puestos de
guardia que vigilan la bahía habían divisado en las aguas
una embarcación que se desplazaba muy lentamente y
pensaron que se trataba de algún comando inglés.
Por la escasa luz (sólo la de la luna) se confundieron y
comenzaron a disparar; al tirar a un puesto, los otros
también lo hicieron, hasta que al fin verificaron que era un
bote de algún pescador del pueblito que lo había dejado
mal amarrado, pero a nosotros ¡flor de susto que nos dio...!
133