Page 9 - Edicion 631 tribuna libre

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OPINION

Domingo 21 de Abril de 2019
Miércoles 15 de Enero de 2013
Miércoles 15 de Enero de 2013 Semana del 11 al 17 de mayo de 2020
De Shakespeare a Ionesco, ¿qué virus fue peor?

Por Andreu Gomila | 15/05/2020 | Cultura Fuentes: CTXT

que ha leído que han localizado treinta y Have I none, Chair y The under room nos
dos rinocerontes, a lo que Botard exclama: muestran ciudades donde se han abolido
«¡Exageraciones!». las relaciones sociales y donde la gente
Hasta entonces, los acontecimientos vive aterrorizada ante la llegada de
suceden lejos a pesar de la muerte del extranjeros
gatito. Berenger, el protagonista de la Sarah Kane fue mucho más lejos que
pieza se pelea con Jean y decide ir a su Beckett. En su primera obra, Aniquilados
casa a visitarlo. Entonces, lentamente, (Blasted), nos presenta una escena
observa la transformación de su amigo aparentemente naturalista: el maduro Ian
en paquidermo. «Me dan asco, los y la joven Cate están en una habitación
hombres, que no se interpongan en mi de hotel. Él ejerce sobre ella un poder
camino que los aplastaré», le dice Jean a brutal. No sabemos qué pasa fuera, como
Berenguer, ya metamorfoseado. Más son las calles, qué noticias salen en la
tarde, Daisy recuerda las últimas palabras tele. Hasta que un soldado irrumpe en su
de Botard: «Debemos estar de acuerdo intimidad y todo queda destruido. «En la
con nuestra época». Ella, Berenger y ciudad todo el mundo llora», dice ella. Ha
Lady Macbeth se limpia las manos compulsivamente. Dudard charlan sobre lo que está salido y vuelve con un bebé en brazos. A
Macbeth (1948), de Orson Welles ocurriendo, sobre la expansión de este Ian le han sacado los ojos. «La mayoría
mal que convierte a las personas en de la gente se ha rendido», repite ella.
Ya en el S.XVII el inglés impregnó sus defraudado. «¡Quisiera transmitirles la rinocerontes. Son mayoría, creen, y Ian quiere suicidarse, pero Cate intenta
obras con las plagas de su época. Años peste, si pudiera cogerla para ellos!», comentan que deben hacer algo. En vano, impedírselo. «Sé que me quieres castigar
más tarde, autores como Ionesco, Sarah dice, cuando los senadores acuden a porque pronto se dan cuenta que ya no intentando que viva», le dice él. Al final
Kane, Samuel Beckett o Edward Bond visitarlo al final de la pieza. En Rey Lear, lo son. Demasiado tarde. de la escena 4, Ian coge la pistola y se
describieron realidades que se parecían el monarca define a su hija Goneril como
La pieza de Ionesco no habla de ningún dispara en la boca, pero el arma está
mucho a la actual «una llaga de peste, un carbúnculo en
virus, sino del totalitarismo, el gran mal descargada. Acto seguido, Cate se
En el ápice de la carrera de William relieve en mi sangre corrupta», clara del siglo XX. Los resistentes se percata de que el bebé ha muerto. Los
Shakespeare, entre 1603 y 1613, los referencia a la peste bubónica, muy atrincheran en sus casas. Están muertos dos están condenados a vivir juntos, a
teatros de Londres estuvieron cerrados presente en la infancia del Bardo. de miedo. «¡Voluntad! Hay que tener conllevar su sufrimiento. Así como los
78 meses (el 60% del tiempo) debido a las Un rinoceronte atropella a voluntad», dice Berenguer al principio cuatro personajes de Ansia (Crave),
numerosas plagas que azotaron la del tercer acto. Berenguer será el último obligados a soportar a la vez su dolor.
Inglaterra de la época. Entonces, un gatito hombre, el único superviviente y, en el «Solo nos puede salvar el amor y el amor
escribió, entre otras, Macbeth, Antonio En el siglo XX la cosa cambia. ¿Quién monólogo que cierra la obra, expresa su me ha destruido», dice A. «Nadie
y Cleopatra, Rey Lear y La tempestad. quiere pestes cuando las guerras se han deseo de convertirse, él también, en sobrevive a la vida», asegura más
Aunque no fuese nunca un tema central, llevado vidas por millones?, podríamos
rinoceronte, como todo el mundo. Sin adelante. Y C le responde: «Y nadie puede
la enfermedad sobrevenida, inesperada, pensar. Tenemos distopías, muchas,
embargo, es consciente de que tiene la saber cómo es la noche».
que causa miles de muertos, sobrevuela relatos atroces, pero plagas, pocas. Casi responsabilidad de salvar a la especie y Edward Bond, que influyó en el teatro de
muchas de sus obras. ni citadas. Hay poco pánico, terror o sale de escena con la escopeta cargada Kane, ha pensado mucho en el mundo
En Macbeth, que urdió durante la desolación ante el presente o el futuro gritando: «¡No capitularé, no que viene. No en las plagas que
epidemia de 1606, Macduff le pregunta a próximo. Ni los personajes que Sartre capitularé!». padeceremos, pero sí en el devastador
Ross si Escocia sigue como la dejó, a lo cierra en su infierno de Huis clos parecen Beckett y el mundo de camino que emprenderemos. Have I none,
que el noble le responde: «Sí, pobre muy asustados. Más bien, se hacen Chair y The under room nos muestran
nación, casi con miedo de reconocerse a preguntas sobre su vida, qué los ha después ciudades donde se han abolido las
sí misma. No se puede llamar nuestra llevado hasta allí. Hay una brillante Hay quien dice que, en el fondo, las obras relaciones sociales y la memoria, se
madre, sino nuestra tumba, donde no se excepción: los habitantes de «la ciudad de Beckett son distopías puras y duras. persigue la imaginación y donde la gente
ve jamás sonreír sino a quien no sabe de provincias» donde Ionesco sitúa su ¿A quién esperan realmente Vladimir y vive aterrorizada ante la llegada de
nada: donde los suspiros, gemidos y Rinoceronte caminan del menosprecio Estragon? ¿Dónde vive Winnie? ¿De qué extranjeros. ¿Les suena? En el prólogo de
gritos que desgarran el aire, surgen sin ante un paquidermo que pasa trotando hablan Clov y Hamm? Todos sus Have I none, escribe: «’Toda la existencia
ser observados: donde la violenta tristeza por la calle al susto generalizado. La gente personajes célebres parecen humana es ficción. Al final, la realidad
parece un humor cualquiera: el redoble se está transformando en este animal suspendidos en el vacío sideral. Ni Mad natural no nos impone sus propias
por los muertos, apenas se pregunta por enorme y cornudo (¿asiático o africano?) Max fue tan lejos. El tema del irlandés es necesidades… La ficción es nuestra
quién es, y las vidas de los hombres y los nervios, así que la plaga se acerca, la incomunicación, pero de qué época. realidad porque, en última instancia,
buenos se extinguen antes que las flores están a flor de piel. Porque podría tratarse del mundo que determina nuestra existencia en la
que llevan en el sombrero, muriendo sin De entrada, no hacen caso, piensan que nos espera, alejados unos de otros. Ada, sociedad. El poder de la ideología es que
enfermedad». Ross se refiere a la maldad no es cosa suya, como nos ha pasado a en Cenizas, le dice a su marido: «Estarás usa las fuerzas humanizadoras (nuestros
de Macbeth, que no ha dejado títere con nosotros con el maldito coronavirus. Los solo en el mundo con tu voz, no habrá apetitos, pasiones, necesidades) que nos
cabeza, pero los estudiosos no dudan en personajes de Ionesco se engañan, otra voz más que la tuya». Es la soledad unen a la realidad de la naturaleza, para
señalar que de lo que Shakespeare está porque también serán víctimas. La que teme Winnie de Días felices. unirnos a sus ficciones psicóticas. Nos
hablando es de lo que veía por su ventana camarera anuncia que ha visto a un Vi, en Vaivén (Come and go), se hace una liberamos de estas ficciones solo usando
ese verano de 1606. rinoceronte y el dueño del café le suelta: pregunta que ahora, confinados, todos la misma fuerza». Ya sabemos lo que
En Timón de Atenas y en Romeo y Julieta «¡Tú ves visiones!». Aunque el nos hacemos: «¿No podemos hablar de tenemos que hacer: no poner límites a la
las plagas son cruciales. En la última, por dramaturgo acota que sabe que su los viejos tiempos? (Silencio) ¿O de qué creación.
ejemplo, una epidemia coge al emisario empleada tiene razón. No quiere verlo. pasó después? (Silencio) ¿Nos F u e n t e : h t t p s : / /
que fray Laurence ha enviado a Romeo Cuando aparece otro, la parroquia tomaremos de las manos a la antigua c t x t . e s / e s / 2 0 2 0 0 5 0 1 /
En Timón de Atenas y en Romeo y Julieta resopla. Y el rinoceronte atropella a un usanza?». Antes, Ru le ha preguntado a C u l t u r a s / 3 2 1 8 5 /
las plagas son cruciales. En la última, por gato. La propietaria del felino entra en el Flo si Vi nota que ella misma ha cambiado.
ejemplo, una epidemia coge al emisario bar, le ofrecen coñac sin parar y los Son tres mujeres mayores sentadas en un s h a k e s p e a r e -
que fray Laurence ha enviado a Romeo clientes, como tertulianos antes de la banco que observan el mundo que las i o n e s c o -
para advertirle que Julieta ha falseado su tormenta, debaten sobre estupideces. rodea… Al final, se dan las manos. Y Flo d r a m a t u r g o s -
muerte. La carta no llega a su destino, y Escurren el bulto. La noticia del atropello cierra la breve pieza diciendo: «Puedo c o r o n a v i r u s -
el Montague decide suicidarse… Timón sale en el periódico y, incluso así, notar los anillos». No llevan. p a n d e m i a - d i s t o p i a -
azota con plagas a los que le han continúan sin preocuparse. Daisy dice andre u-gom ila .htm