Page 61 - La Iridologia Ciencia o Espiritismo
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esposa del pastor, sorprendida por la precisión del diagnóstico, tomó el remedio indicado y al mes
regresó a la consulta. Esta vez tuvo que esperar bastante, y conversando con la enfermera, ésta le contó
que había conocido al doctor en la “escuelita”. La esposa del pastor le preguntó: “¿En qué escuelita?” Y
la enfermera le contestó: “En la escuelita científica Basilio”. La esposa del pastor se puso de pie, anuló
la consulta y se despidió de la enfermera, para no volver. Ella sabía que las escuelas científicas Basilio
son los centros espiritistas más populares en la Argentina. El médico que la había atendido no era un
endocrinólogo, sino un espiritista que practicaba la iridomancia. La adivinación es el arte
diabólico de engañar diciendo la verdad.
Después de haber leído este dialogo podemos observar que el diagnostico
hecho por un laboratorio es corroborado por el diagnóstico del iris de los ojos, en
segundo lugar podemos ver que en ningunos de los casos a las personas tratadas
por el examen del iris fueron hipnotizadas, o se le pusos a tener un trance, en su
primera visita no sintieron ninguna presencia extraña ni nada que las estuviera
acosando para poseer sus mentes. Se nombra Hechos 16:18-35, pero si analizamos
el modo de “trabajar” de aquella joven POSEIDA por un demonio, veremos que fue
muy diferente a la experiencia que vivieron las dos señoras que se consultaron con
la iridóloga y el iridólogo.
En el caso de la enfermera leímos que a ella se le detecto el problema que le
aquejaba, pero aparte de eso se le detectó una anormalidad que no sabía y que era
una herencia genética de su padre que en efecto era tuberculoso cuando la
procreo, como hemos visto en los temas antes expuestos en este libro, la iridología
tiene la capacidad de mostrar en la personas signos de alteración que aún no se ha
manifestados aun, como el caso de la enfermera, que su padre era tuberculoso aun
antes de ella nacer, es como escribe Bernard Jensen “Una debilidad hereditaria del
hígado o un páncreas que no funciona normalmente pasara al hijo y este a la vez lo
trasmitirá al suyo.” (Ciencia y Práctica de la Iridología, pág. 138).