Page 104 - El libro de Enoc
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Capítulo 62
Así ordenó el Señor a los reyes, a los poderosos, a los dignatarios y
a todos los que viven sobre la tierra, diciendo: «Abrid los ojos y
levantad vuestras frentes por si sois capaces de reconocer al
Elegido».
El Señor de los espíritus se sentó en su trono de gloria, el espíritu
de justicia se esparció sobre Él y la palabra de su boca exterminó a
todos los pecadores e injustos y ninguno de ellos subsistirá frente a
Él. (Ap 19:15)
Ese día todos los reyes y los poderosos y los que dominan la tierra
se levantarán, le verán y le reconocerán cuando se siente sobre el
trono de su gloria; la justicia será juzgada ante Él y no se
pronunciará palabra vana frente a Él.
El dolor vendrá sobre ellos como a una mujer en un parto difícil,
cuando su hijo viene por la abertura de la pelvis y sufre para dar a
luz. (Mc 13:8)
Se mirarán los unos a los otros aterrorizados, bajarán la mirada y la
pena se apoderará de ellos cuando vean a este Hijo de Mujer
sentarse sobre el trono de su gloria. (Dn 7:13; Mt 25:31; Mc 14:62)