Page 10 - Corazones Reales
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María murió el 7 de marzo de 1517 en Lisboa a consecuencia de su último parto, del que nació un niño llamado Antonio en 1516, que vivió pocos días. La salud de la reina era muy delicada debido no sólo a sus numerosos embarazos sino a que en algunos de sus partos habían nacido varios hijos.
El frustrado heredero a las tres coronas
Posteriormente a la muerte de María, el rey Manuel I casó con Leonor de Austria, hija de Juana I de Castilla y Felipe el Hermoso, y sobrina, por tanto, de María de Aragón.
La política de los Habsburgo, como la de los Reyes Católicos, era procurar matrimonios políticamente ventajosos para el futuro de la dinastía, por ello, prometieron a la hija mayor de Juana I y Felipe el Hermoso, Leonor, con su tío (tío por partida doble ya que había estado casado con su tía Isabel y luego su tía María) Manuel I de Portugal, al no llegar a un acuerdo para que se desposase con su heredero el príncipe Juan (hijo de Manuel I), quien finalmente se casaría con la hermana de Leonor, Catalina (ésta era la hija menor de la reina Juana I, recluida con ella en Tordesillas durante toda su infancia).
El matrimonio de Manuel y Leonor se celebró en Lisboa el 7 de marzo de 1519, contando el rey luso con cincuenta años de edad y la infanta con veintiuno. Fruto de la unión nacieron dos hijos: Carlos (fallecido al poco de nacer) y María, quien estuvo a punto de convertirse en la esposa del futuro Felipe II, pero las dilaciones y el fallecimiento de Eduardo VI de Inglaterra precipitó que Felipe se casara finalmente con su tía María Tudor, reina de Inglaterra.
Dos años después de la boda, Manuel I falleció víctima de la peste en Lisboa (13 de diciembre de 1521).
La joven viuda, Leonor, decidió retornar a España al lado de su hermano Carlos V, viéndose obligada a dejar en Portugal a su hija María, de sólo seis meses de edad. No volvería a verla en muchos años, siendo la relación entre madre e hija distante y difícil, sobre todo para la infanta portuguesa.