Page 919 - Biblia el Unico Dios
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7 Cuanto al tramposo, sus tramas son malas, se dedica a inventar maquinaciones para sorprender a los pobres con palabras engañosas, cuando el pobre expone su causa.
8 Mientras que el noble medita nobles cosas, y en las cosas nobles está firme.
Advertencia a las mujeres de Jerusalén
9 Mujeres indolentes, ¡arriba!, oíd mi voz; hijas confiadas, escuchen mi palabra. 10 Dentro de un año y algunos días temblaran las que confían, pues se habrá acabado la vendimia para no volver más.
11 Ustedes que viven despreocupadas, tiemblen; ustedes que se sienten confiadas, estremézcanse, quítense esos vestidos
y pónganse ropas ásperas en señal de dolor.
12 golpéense el pecho, por los campos atrayentes, por las viñas fructíferas.
13 Sobre la tierra de mi pueblo zarza y espino crecerá, y también sobre todas las casas de placer de la villa alegre,
14 Porque los palacios quedarán desiertos, la multitud de la ciudad cesará; las torres y fortalezas se volverán cuevas para siempre, donde descansen asnos monteses, y ganados hagan majada;
15 hasta que sobre nosotros sea derramado el Espíritu de lo alto, y el desierto se convierta en campo fértil, y el campo fértil sea estimado por bosque.
16 Reposará en la estepa la equidad, y la justicia morará en el campo berde;
17 el producto de la justicia será la paz, el fruto de la equidad, una seguridad perpetua.
18 Y habitará mi pueblo en albergue de paz, en moradas seguras y en posadas tranquilas.
19 - La selva será abatida y la ciudad hundida.
20 Dichosos ustedes, que sembraran junto a todas las corrientes, y dejaras sueltos el buey y el asno.
Isaías 33
El Señor (יהוה) traerá salvación
1 ¡Ay, tú que saqueas, y no has sido saqueado, que despojas, y no has sido despojado! En terminando tú de saquear, serás saqueado; así que acabes de despojar, serás despojado;
2 Señor (יהוה), ten piedad de nosotros, en ti esperamos. Sé nuestro apoyo todas las mañanas y nuestra salvación en tiempo de dificultad.
3 Los pueblos huyeron a la voz del estruendo; las naciones fueron esparcidas al levantarte tú.
4 se amontona el botín como quien amontona saltamontes, se abalanzan sobre él, como se abalanzan las langostas.
5 »Dios nuestro, tú eres el Dios soberano que vive en el cielo. Has hecho que en Jerusalén haya honestidad y justicia;
6 nos haces vivir seguros; tu sabiduría y tus conocimientos nos han dado la salvación; ¡el obedecerte es nuestro tesoro!