Page 265 - Historia antigua de Megico: : sacada de los mejores historiadores espnoles, y de los manuscritos, y de las pinturas antiguas de los indios; : dividida en diez libros: : adornada con mapas y estampas, e ilustrada con disertaciones sobre la tierra, los animales, y los habitantes de Megico.
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260 HISTORIA ANTIGUA ÜE MEG1CO.
todas las interiores, son templadas, secas, y sanas. Estas son de-
masiado altas, y aquellas demasiado bajas. En unas reinan los
vientos del Sur, en otras el Levante, en otras el Norte. El mayor
v frió de todos los puntos habitados no llega al de Francia, ni aun al
de Castilla, ni el mayor calor puede compararse cou el de África, ni
con el de la canicula en algunos pueblos de Europa. La diferencia
entre el verano, y el invierno es generalmente tan pequeña, que
muchas personas usan la misma ropa en Agosto, y en Enero. Todo
esto, y lo que he dicho en otra parte, acerca de la benignidad, y
suavidad de aquel clima, es tan notorio, que no necesitamos de citas,
ni de argumentos para probarlo.
Mr. de Paw, para demostrar la malignidad del clima de America,
alega, 1. La pequenez, y la irregularidad de los animales. 2. La cor-
pulencia, y la enorme multiplicación de los insectos. 3. Las enferme-
dades de los Americanos, y especialmente el mal venéreo. 4. Los
defectos de su constitución física. 5. El exeso del frió en algunos
países de America, con respecto a los del antiguo continente, situados
a igual distancia de la Linea Equinoxial.
Ahora bien, la supuesta pequenez, y la menor ferocidad de los
animales Americanos, de que hablaré después, lejos de demostrar
la malignidad del clima, manifiestan su suavidad, si damos crédito al
Conde de Bufion, de cuyo testimonio se ha valido el mismo Mr. de
Paw, en todo lo que dice contra Pernetty. BufFon, que en muchos
pasages de la Historia Natural alega la pequenez de los animales
Americanos, como una prueba cierta de la malignidad del clima, dice
en el tomo xi, hablando de los animales selváticos. " Como todas
las cosas, y aun las criaturas mas libres, están sugetas a las leyes
físicas, y como los animales, igualmente que los hombres, están some-
tidos al influjo del cielo, y de la tierra, parece que las mismas causas
que han civilizado, y suavizado la especie humana en nuestros climas,
han debido producir los mismos efectos en las otras especies. El lobo,
que es quizas el cuadrúpedo mas feroz de la Zona Templada, es, por
otra parte, incomparablemente menos terrible que el tigre, el león, y
la pantera de la Zona Tórrida, y que el oso blanco, el lobo cerval, y la
hiena de la Zona Fria. En America, donde el aire, y la tierra son
mas blandos que en África, el tigre, el león, y la pantera solo tienen
de terrible el nombre. Si la ferocidad unida a la crueldad, formaba
parte de su naturaleza, no hai duda que han degenerado, o por mejor
decir, han sufrido el influjo del clima : bajo un cielo mas suave, su
índole se ha amansado. De los climas estremosos salen las drogas,