Page 42 - SOFY_ La Guardiana de los Sombreros Libro intec (Julia Perellon Mancebo)
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Sofy, la Guardiana de los Sombreros: Un Viaje Encantado a través del Tiempo
"Bienvenida a los rugientes años 20, Julia", le dije, sonriendo ante su
mirada de asombro.
Nuestra primera parada fue una moderna boutique de moda
donde Julia se decantó por un elegante vestido flapper y un
sombrero cloche a juego. En esa época, los sombreros cloche, que
se ajustaban a la cabeza y se adornaban con intrincados detalles, eran
lo último en moda. Estos sombreros representaban mucho más que
un simple adorno, eran un símbolo de la emancipación de la mujer,
que desafiaba las normas sociales y buscaba afirmar su identidad.
"Observa bien, Julia", indiqué mientras nos ajustábamos los
sombreros frente al espejo. "Estos sombreros representan mucho
más que una tendencia. Son un símbolo de la liberación y
empoderamiento de las mujeres. Al lucirlos, las mujeres de los años
20 estaban haciendo una declaración de independencia y audacia."
Posteriormente, nos dirigimos al célebre Cotton Club, un
animado club de jazz local donde la música llenaba cada rincón y la
energía era casi palpable. Las mujeres lucían con orgullo sus mejores
vestidos y sombreros, danzando al ritmo de la música con alegría y
libertad. Me dejé llevar por la melodía, La música me transportó a
mis propias experiencias en aquella época, y no pude evitar perderme
en el recuerdo de aquellos días.
"Fue en lugares como este donde viví los años 20, Julia", le
confesé, mientras nos dejábamos llevar por el frenético ritmo de la
música. "Era una época de liberación, de búsqueda de la felicidad.
Los problemas se dejaban para el mañana. Todo lo que importaba
era el presente, el aquí y ahora."
Paseamos por las bulliciosas calles de la ciudad, disfrutando del
cálido sol y del ajetreo de la multitud. Había una energía en el aire,
una sensación de posibilidad y emoción que era innegable. Era la
misma energía que había experimentado en mi juventud, viviendo en
aquella época tan vibrante y desafiante.
Tomamos un descanso en un café local para disfrutar de una
taza de té y compartir nuestras experiencias. A petición de Julia, me
lancé a relatar mis vivencias de los años 20. Le conté sobre las fiestas,
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