Page 53 - ALEJANDRA

Así sucedió que la desaparición de Guillermo fue
planeada, y los hilos de esta conspiración fueran tejidos
desde las sombras. Toda esta especie de motín
necesitaba de alguien que lo ejecutara, y es aquí en
donde entra nuestro joven ladrón.

El día que lo contrataron, Cancino fue llevado a un lugar
secreto, una especie de sala en donde había una mesa y
algunos muebles alrededor, para llegar ahí, Cancino fue
vendado, así es que no pudo reconocer el camino para
ver por donde lo trajeron, más cuando estaba dentro de
la habitación, en una de las esquinas de esta, se
encontraba un hombre que tal parece oficiaba de
escriba, y mientras los hombres del partido hacían el
trato, Cancino lo observo de reojo cuidadosamente.

Sin querer ambos se conocían, ya que estuvieron algún
tiempo juntos en prisión y por cosas de la casualidad
Cancino salvo a este hombre que ahora oficiaba de
escriba (y dentro de la prisión estaba preso por estafa)
de unos matones que intentaron matarlo en una
situación comprometedora, pero por las circunstancias
de la escena, Cancino no pudo saludarlo.

Los ortodoxos le explicaron a Cancino que este lugar
tenía como finalidad la reserva en los secretos de los
más antiguos miembros y que cada cosa que pasaba
dentro del partido, era fraguada aquí, así es que,
terminada la reunión, le dieron a Cancino la mitad del
dinero y la otra parte se la entregarían cuando terminara
el trabajo.