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Águila Blanca

Lo Cuidó De Morir Congelado

Siendo apenas de seis
meses, el Señor lo cuidó de morir
congelado. Vivian en la sierra del
condado de Cumberland en el
estado de Kentucky, en una
destartalada casa.

En un tiempo cuando el
padre del niño se encontraba fuera de la casa había nevado
mucho, y no pudieron salir por varios días. La casita donde
se encontraban madre e hijo, no tenía calefacción lo que
significaba que para la próxima nevada sería el fin para
ambos.
Se había acabado el alimento y su madre se estaba
poniendo más débil cada día. Ella llegó a pensar que les
habían llegado su fin y cuenta que juntó toda la ropa y
abrazándose a la criatura, se cubrió con esa ropa para poder
estar lo más caliente posible. Podría haber sido el fin de
ambos, si el Señor no hubiera intervenido en ese tiempo.
Pero el mismo Dios que a través de Jesús dijo: “Os aparejaré
lugar, vendré otra vez, y os tomaré a mi mismo para que
donde yo estoy, vosotros también estéis”. Ahora, estaba
lidiando con un campesino de los alrededores para que
fuera a investigar por qué era que no salía humo de la
chimenea por varios días.
Cuando llegó a la casa llamó y nadie respondió, forzó
la puerta y entró y encontró casi a punto de congelación a
la madre. Entonces el hombre trajo leña e hizo fuego en la
chimenea y consiguió alimento para ellos, así fueron
salvados de morir. Dios hizo que un campesino se
preocupara porque Dios estaba cuidando el lugar que Él
dijo que iría a aparejar.

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