Page 15 - Edicion 806 El Directorio

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Científicos logran regenerar tejido dental en
el laboratorio
Según estiman los expertos, en diez años o menos sería posible que en vez de trata-
severa, la pulpa puede gene- rar nueva dentina para repa- rarla – todo esto pasa
señar un andamio de dos lados, y logramos guiar las células madre para diferen- ciar entre células de pulpa y dentina, produciendo odonto- blastos que eventualmente podrían reparar el conducto radicular. Nuestro andamio inteligente puede hacer esta diferenciación con gran efica- cia”.
Si bien se requiere realizar más investigación al res- pecto y falta mucho para pro- bar su eficacia en personas, es un gran comienzo para la investigación de la salud dental. El siguiente paso, se- ñalan, es comenzar las prue- bas en modelos animales.
“Creo que en los siguientes
diez años, o incluso en menos tiempo, cuando los pacientes vengan a un endo- doncista para un tratamiento conducto, podremos entre- garles una alternativa mejor, la cual será regenerar los nervios y los vasos sanguí- neos y regenerar la pulpa nuevamente en el diente en vez de usar material inerte”, indicó Yang. “Con inversión y mucha investigación, creo que lo lograremos pronta- mente”.
mientos conducto se podrá ofrecer de alternativa rege- nerar los nervios, vasos san- guíneos y la pulpa del diente en vez de rellenarlo con ma- terial inerte como se hace ahora.
Un equipo de científicos de la Universidad del Temple en Estados Unidos han logrado un gran avance en lo que se refiere a salud dental. En su investigación, los expertos lograron mediante células madre dentales, guiar la re- generación de dentina y te- jido pulpar, incluyendo vasos sanguíneos y nervios.
“Estos dos tejidos vienen de una región similar y tienen un relación cercana entre sí. Crean el complejo dentino- pulpar”, explica Maobin Yang, uno de los autores del estudio, en un comunicado de la universidad. “Si la ca- ries de la dentina no es tan
naturalmente – “.
En los casos en donde la pulpa está muy infectada, el nervio tiene que ser retirado, el canal se limpia y se rellena con un material inerte.
Para encontrar una solución alternativa, Yang comenzó a investigar otros posibles tra- tamientos. Uno de ellos, fue el uso de células madre.
Para evitar que el tejido cre- ciera sin estructura – es decir, diferenciando en qué zona desarrollar dentina y en qué zona desarrollar tejido pulpar – Yang y su equipo desarrollaron mediante la bioingeniería una especie de “andamio”, el cual pudo guiar el crecimiento de tejido en el laboratorio.
“Lo bello de este sistema es que in vitro (dentro de un tubo de ensayo) podemos di-
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Edición 806 Del 17 al 23 de enero del 2019
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