Page 293 - NUEVE MUJERES, LIDERAZGOS QUE INSPIRAN

Nueve Mujeres: Liderazgos que Inspiran
y cuida las condiciones naturales que hacen posible la vida en todas sus manifestaciones”, como ella lo señala una y otra vez.
“Creo que el universo tiene un plan para nosotros y asumo como opción poner todo lo que esté de mi parte para que se devele y torne más humana a la Humanidad. Saberme parte de este plan es lo que otorga sentido a mi existencia y me hace saltar de la cama cada mañana. Casa de la Paz ha sido mi lugar de servicio para desarrollar mi vocación personal. ¿Cómo descubrir a qué he venido a esta Tierra? Hay que encontrar aquello que te guste hacer y que te sea fácil; ahí estará la clave de tu existencia. Por el contrario, motivados por mandatos familiares y deseos de hacer dinero o prestigio, podemos encontrarnos en un trabajo tedioso y poco gratificante. Decirse “tengo que” es muy distinto que decirse “yo elijo”; en la primera versión la energía se consume en cumplir, obtener la aprobación de los demás; en la segunda, la energía fluye y la gratificación surge de lo más profundo”, indica.
Para comprender a Ximena Abogabir es importante primero conectarla con su origen: ella es una típica baby boomer. Pertenece a la generación de los blue jeans, del rock ‘n roll, del twist, de las camisas floreadas para los hombres y la marihuana, la minifalda, la revolución de la flores. A esos jóvenes les tocó vivir la Guerra Fría, las protestas, los movimientos en defensa de los derechos civiles, de los ecologistas, de las feministas, de los homosexuales, de los discapacitados. Tenían una conciencia especial que después de dos Guerras Mundiales tan seguidas había que detener, a como tuviera lugar, un holocausto nuclear. Hay quienes piensan que por ese motivo desarrollaron un especie de liderazgo muy idealista. Su propósito siempre fue cambiar al mundo.
“Absolutamente cierto, soy baby boomer total; de hecho desde que tengo uso de razón he estado abriendo caminos; mi generación es la primera generación de profesionales mujeres en Chile; en el colegio fuimos la última generación sin exámenes válidos. Es increíble, pero mi hermana, que tiene dos años más que yo, es totalmente generación anterior; entre ambas hay un verdadero abismo en la forma de mirar el mundo. Yo soy primera generación de cambio, siempre en movimiento, siempre aprendiendo. Nosotros, los baby boomers, tuvimos que descubrir cómo ser madres de otra manera, madres que nos gustaba trabajar, esposas distintas. De hecho ahora estoy aprendiendo a ser abuela, pero también de un modo distinto. En mi familia se pensaba que yo era pésima dueña de casa, que mis pobres niños estaban abandonados y era porque yo hacía todo apurada, porque me interesaba dedicar mi tiempo también a otras cosas. Debo decir eso sí, que siempre tuve la intuición de que no podía perder mi balance personal, porque eso me hacía
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