Page 143 - UNIVERSIDAD AUTONOMA DE ICA
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Docente: Nathia Erika Castro Vilcapuma
no la pueda ver según ella, y su madre que se había quedado en la sala después
hizo lo mismo , se encerró en su cuarto y donde también empezó a llorar de
impotencia, porque ya no sabía qué hacer para que su princesa vuelva a ser a
como era antes de la muerte de su esposo; ese mismo día en la cena su madre le
preparó su plato favorito y le dijo cuanto significaba Fiorella para ella, y que le
pedía perdón por no saber tratar a su hija después de esta tragedia o de no
tener las fuerzas suficiente de poder ayuda profesional y de no poder olvidar
aquella tragedia donde pensaba que con darle de todo o cumplir sus caprichos
como del no querer estudiar o hacer todo lo que ella quería, era suficiente, para
que Fiorella se sintiera tranquila y no sufra por la pérdida de su padre , pero no
era así, nada borraba lo ocurrido …nada eran suficiente para olvidar, y su madre
seguía hablando del error que había cometido y Fiorella solo miraba el plato
tratando así de esconder las lágrimas, que ni así se podía ocultar, era tanto el
sufrimiento que causaba la muerte de su padre en ella que miró a su madre y le
dijo “mamá ya no sigas” ¡ya basta! Ya no puedo más, no ves que aún me duele…
“dime porque se fue justo cuando más lo necesitaba porque él” y su madre al
verla destrozada, solo le dijo, ni yo sé, pero lo que, si sé, es que él nos está
cuidando desde cielo. Y Fiorella y su madre esa noche se dijeron todo, Fiorella le
contó absolutamente todo; ella abrió su corazón, desfogando así todo lo que
sentía todo lo que tenía guardado; bueno ambas, aunque en los ojos de su madre
se veía que escondía mucho dolor y cansancio, pero ella sabía que no podía decir
nada porque sobra y basta con el dolor que escucho que sentía su hija, por
primera vez, después de varios años de no platicar, de no poder tener una charlar
de madre e hija, donde estén interactuando, pues no sé podría romper esa luz,
esa felicidad que busca mi hija dijo la madre en su mente ….Fiorella sé sintió
tranquila en paz al poder sacar tanto dolor que llevaba por dentro … y le contó a
su madre de aquella vez que vio a los adolescentes felices y que ella quería sentir
lo mismo y la madre le dijo ¡porque no te acercas hija¡ ya es hora de tener amigos,
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