Page 34 - CARTILLA INTERACTIVA PRÁCTICA RESPONSABILIDAD SOCIAL
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Integrantes: Juan Diego Munévar Robles, Vanessa Parra Ruíz, Néstor Yezid Ospina,
Leidy Revelo
se produce al cocinar con combustibles de biomasa y carbón. Ni siquiera el sida, la tuberculosis
y la malaria juntas causan tantas muertes como el aire sucio.
Seguramente usted es consciente de la problemática, pero no alcanza a dimensionar los efectos.
Se levanta un día, abre la ventana y una nata espesa envuelve el cielo, tan espesa que ni siquiera
le permite ver el paisaje a lo lejos. Sale de su casa, espera el autobús y una nube oscura de
humo, proveniente de un viejo tubo de escape, se dirige a usted y lo envuelve todo hasta causar
tos e irritarle los ojos. No solo le queda la incomodidad de haber sido devorado por un
monstruo negro, sino una posible afectación a su salud que puede ir desde neumonía, asma y
accidentes cerebrovasculares, hasta cáncer de pulmón. En Colombia este problema genera más
de 8.000 muertes al año y cerca de 68 millones de síntomas y enfermedades asociadas.
Lo que usted inhala todos los días es una mezcla bastante compleja de partículas líquidas y
sólidas, de sustancias orgánicas e inorgánicas que varían de tamaño, forma y composición.
Hay algunos gases suspendidos en el aire (como el monóxido de carbono, el dióxido de azufre
y el ozono) y otras partículas conocidas técnicamente como PM10 y PM2,5, éstas últimas
altamente nocivas dado que son cien veces más delgadas que un cabello humano, por lo que
pueden penetrar fácilmente el aparato respiratorio e incluso llegar hasta el torrente sanguíneo
y la placenta. En el país, aproximadamente un 80 por ciento de la contaminación del aire
proviene de fuentes móviles (camiones, volquetas, motos, buses y taxis) y el 20 por ciento
restante de fuentes fijas (chimeneas, industrias, quemas, minería).
La contaminación del aire tiene muchas definiciones, pero se puede definir como la existencia
de elementos contaminantes, es decir, que no deberían estar en él, y son de dos tipos: los
químicos y los biológicos.
Un ejemplo claro es la niebla tóxica que flota por encima de las ciudades es la forma de
contaminación del aire más común y evidente. No obstante, existen diferentes tipos de
contaminación, visibles e invisibles, que contribuyen al calentamiento global. Por lo general,
se considera contaminación del aire a cualquier sustancia, introducida en la atmósfera por las
personas, que tenga un efecto perjudicial sobre los seres vivos y el medio ambiente.
El dióxido de carbono, un gas de efecto invernadero, es el contaminante que está causando en
mayor medida el calentamiento de la Tierra. Si bien todos los seres vivos emiten dióxido de
carbono al respirar, éste se considera por lo general contaminante cuando se asocia con coches,
aviones, centrales eléctricas y otras actividades humanas que requieren el uso de combustibles
fósiles como la gasolina y el gas natural.