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mismo paisaje, el mismo entorno, pues constantemente cambia y se mueve tu horizonte.
En ocasiones es tan diferente el horizonte al que creíste que sería inicialmente, que nos detenemos, nos asustamos y se nos cae la avioneta. Entonces, cientos de posibilidades y obstáculos, que nos hacen pensar que nunca llegaremos a lograrlo, nos harán perder de vista el camino transitado, los logros conseguidos.
Uno de los impedimentos para convertirte en un ejemplo del Putas de Aguadas es el de que muchísimas personas se sienten frustradas a pesar de los grandes logros que consiguen en la vida porque pierden el horizonte. No tienen Claridad.
Por eso mismo debemos entender y aplicar bien la consecución de los objetivos aplicando muy bien este concepto. Esto nos va a permitir no declinar diariamente en los objetivos a cumplir (Trabajarlos día a día, momento a momento) logrando mantener la energía que nos mantenga en el plano de el horizonte elegido; centrado en los ideales que me permitan llegar a donde realmente deseo, generando permanentemente logros, cumpliendo con nuevos y mayores ideales que nos lleven a crecer exponencialmente en todos los sentidos y así estar preparados para sobrepasar cualquier obstáculo en nuestras vidas.
Nunca vas a llegar al ideal si no entiendes que el horizonte es cambiante y se aleja permanentemente. Así como tu vida, el horizonte es cambiante, con constantes modificaciones dadas de acuerdo a tu camino transitado; a tus experiencias que te hacen actuar y reaccionar de diferente manera día a día pues siempre habrá mas para alcanzar y para mejorar.
Pero siendo el ideal y los diferentes horizontes que se nos presentan, los motores de nuestro crecimiento y capacidad de éxito en la vida, debemos construirlos (y seguirlos) de una manera clara para que sean fáciles de buscar, entender y lograr.
El Ideal a veces se confunde con el Horizonte; por eso debes ser muy consciente de que éste, el horizonte, es nuestra guía; es el faro que nos permite ver la diferencia entre lo físico (la tierra, la acción, lo que deseamos manifestar, lograr) y lo espiritual (el cielo, la idea, el anhelo).
El Horizonte es el que nos permite diferenciar y entender lo que es sostenernos en el aire (el espíritu, la mente) y poder llegar a la tierra nuevamente (la materialización).
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