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336 La introducción de La Segunda Venida de criSto a Su igLeSia

               LA VOZ DE LA SEÑAL
               14 de febrero de 1964 [64-0214]
               Tulare, California, Estados Unidos
               Rev. William Marrion Branham
                   [Párrs. 7-8 incluidos en Citas, pág. 121, párr. 1078]
                   7  Uno de estos días, creo que el Señor… Mientras el gran avivamiento como que se ha
               aquietado por toda la nación. Yo le he pedido al Señor, si sería Su voluntad, que me permitiera
               una carpa, instalarla, y no tendremos que rentar nada. Y tener un servicio en la mañana de
               enseñanza con los pastores y demás, quizás desde las diez hasta las doce; en la tarde, las
               instrucciones  sobre sanidad;  y luego  esa noche, orar por los enfermos. Día tras día,  por
               semanas. Y luego no tener servicios el miércoles por la noche, o el domingo, que interfieran, o
               algo. Sólo el domingo por la tarde, así no interferiríamos con el resto de los servicios, y de esa
               manera permitiríamos que vengan todos los que deseen venir. Oraríamos por los enfermos. Y
               si el diablo regresa, o dice algo, entonces podemos venir y examinarlo y simplemente ver lo
               que está sucediendo, ¿ven ustedes?
                   8  Creo que eso podría ser una verdadera bendición para el vecindario, para los pastores y
               todos los que los conozcan. Ellos lo creen. Lo creen absolutamente, o no estarían predicando
               la Biblia. Cualquier creyente de la Biblia, un verdadero creyente de la Biblia, puntúa cada una
               de estas promesas de Dios con un “amén”. Eso es correcto.



               PERSEVERANTE
               5 de marzo de 1964 [64-0305]
               Dallas, Texas, Estados Unidos
               Rev. William Marrion Branham
                   [Párr. 234 incluido en Citas, pág. 122, párr. 1081]
                   234  Pero un don no es algo, un cuchillo, que usted toma y va a hacer algo con él. Alguno de
               estos días voy a conseguir una carpa grande y venir a una ciudad, y quedarme por unos meses
               a la vez, vean, y enseñar; sí. Un don es quitarse a sí mismo del camino para que Dios pueda
               entrar, y ver lo que Él muestra, lo que Él hace. Un don no es: “¡Tengo poder para hacer esto,
               tengo poder!” El poder de un don es quitarse a sí mismo del camino. Y el don que Dios le ha
               dado opera a través de eso entonces, vea, después que usted está fuera del camino. ¿Lo ve?
                   235  Ahora, yo no puedo hacer que Él me diga nada. Él tiene que hacerlo.



               LLAMANDO A JESÚS A LA ESCENA
               19 de marzo de 1964 [64-0319]
               Denham Springs, Louisiana, Estados Unidos
               Rev. William Marrion Branham
                   [Párr. 196  incluido en Citas, pág. 122, párr. 1085]
                   193  Esta es la última cosa prometida a los gentiles. Es verdad. Vean, fue a los gentiles allá
               en Sodoma, que iban a ser quemados. Y eso aquí es a la Novia, que sería la Simiente Real de
               Abraham, siendo la Novia llamada de entre los gentiles. Esa es su señal final, todo eso.
                   194  Márquelo en su libro. Soy un hombre viejo. Pero sólo márquelo en su libro y vean si
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