Page 193 - Libro Medicina 24/7
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sobre el primer caso positivo: “Estamos haciendo el control y monitoreo   tenía Enfermedad Pulmonar Obstructiva Crónica (EPOC), acompañada
 a más de 80 personas con las que la paciente tuvo contacto y realizando   de artrosis. Asistió a su control anual, dado que la conocemos desde nues-
 el aislamiento respectivo” .  tros inicios, y de acuerdo a los nuevos pasos a seguir le dije: “Muchas
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 Como consecuencia, el virus se convirtió en el eje central de toda con-  gracias por venir, pase, es un gusto atenderle, ¿Tiene tos, fiebre, dolor de
 versación. Los pacientes, entre susto y risa decían “¿Será el CORONA,   garganta, ha viajado los últimos 14 días a zonas de transmisión comuni-
 doctorcito?” al indicar que la tos les había llegado de manera repentina.   taria de COVID 19?”, su respuesta fue: “No Licenciada, nada de eso”.
 Era difícil dar una respuesta, ya que lo único conocido, era que estaba en   Sus palabras fueron un respiro para mi alma y la de mis compañeros, con
 Guayaquil, donde las autoridades ya desarrollaban las acciones necesa-  la tranquilidad que implica aquello, pensando en la posibilidad de seguir
 rias para frenar, en algo, la expansión del virus, lo que daba un poco de   abrazando a la familia.
 tranquilidad para regresar a los hogares.  Sin embargo, el oxímetro de pulso marcó 77% de saturación, y su hija
 Ya en la primera semana de marzo, era fundamental  abastecer al   mencionó que su madre, una semana atrás, había asistido al mercado de
 centro de salud de insumos médicos, factor primordial para cubrir la de-  alta afluencia en la ciudad, sitio en el que un comerciante falleció por el
 manda de los usuarios. Me correspondió hacer el contacto para cumplir   virus. La suerte cambió. Como obviedad, el antecedente de EPOC arro-
 con este requerimiento; sin embargo, toda la emoción que tenía, compar-  jaría una disminución en la saturación de oxígeno en sangre, es un hecho;
 tida con los compañeros ante el crecimiento del lugar, se desmoronó al   no obstante, ante la exposición en el mercado, la consulta debería ser de
               otra manera y manejada por las autoridades. Ella normalmente, juntando
 recibir la siguiente respuesta del proveedor: “No licenciada, no tengo ni
 alcohol ni mascarillas”.  Es obvio que el sistema de salud público es el   sus manos como para rezar, solía decir: “Primero Dios y después usted
 primero en jerarquía y en recibir todo lo que necesita para su funciona-  mi Doctorcito, muchas gracias a Usted estoy bien”
 miento; sin embargo, centros como el que fundamos, forman parte de la   Conforme al procedimiento  establecido  por las entidades  guberna-
 red complementaria de salud, así que algo podríamos recibir algún mo-  mentales, al tener casos sospechosos, y hasta que no se demuestre lo
 mento, más allá de entrar en una horrorosa lista de espera. Por lo tanto,   contrario,  correspondía  establecer  el  cerco  epidemiológico,  tanto  para
 la manera de aprovisionarnos debía modificarse y empezó a depender,   ella y sus cercanos, así como para el compañero médico que la atendió,
 exclusivamente, de los propios medios para lograrlo. Sin esos elementos   quien tendría que pasar obligatoriamente al aislamiento por catorce días,
 no podríamos continuar en excelencia.   confiando en que la enfermedad no se manifieste.

 Abril, y una usuaria sospechosa de coronavirus llegó a las instala-  Entonces, recapitulando, el escenario del centro había cambiado. De
 ciones. Para el momento, ya funcionaba el protocolo de atención por la   los dos médicos, el primero ejerciendo en el sistema público con jornadas
 emergencia sanitaria que habíamos establecido, el mismo que incluía el   de más de ocho horas diarias, con limitada atención en lo privado durante
 uso de trajes de bioseguridad. Además, el personal del centro médico   algunas tardes; por su parte, el segundo entrando en cuarentena ante la
 está certificado por la Organización Mundial de la Salud OMS en Ma-  potencial exposición. Quedábamos las dos, enfermera y auxiliar de enfer-
 nejo  de  Pacientes  Sintomáticos  Respiratorios  COVID-19, documento   mería, para cubrir la demanda, con tendencia a la baja, de usuarios en el
 que está publicado para la lectura de los pacientes. En otros casos, lle-  horario permitido, al tiempo de mantenernos arriba emocionalmente para
 gaban a consulta, tomando las precauciones necesarias, pero me decían:   aguantar lo que vivimos. El reto es mantener la motivación lo más alta
 “Muchas gracias Licenciada, si vine poniéndome alcohol en las manos,   posible, para seguir trabajando sin ser presa del miedo.
 pero deme no más el gel”. Había otro grupo de pacientes y familiares   Sucede que los lunes, por la mañana, el teléfono suena sin parar, dadas
 que esperaban en sus automóviles el momento de poder ingresar, y no   las llamadas de los usuarios que pretenden agendar una cita con sus mé-
 en la cálida sala de espera a la que le dedicamos tanto esfuerzo durante   dicos de confianza. Ante el cuadro descrito solo nos quedaba responder
 su construcción. Son cosas a las que habrá que acostumbrarse hasta que   con tono de tranquilidad: “Mil disculpas por no poder ayudarle, este
 los procedimientos sean comunes para todos, dentro de las instalaciones.  momento, en la tarde encantados” mientras que, por dentro, la tristeza
 Todo cambió ese día dos de abril. Llegó una paciente que, como conse-  recorría las venas, desde varios puntos de vista. Esperar que un paciente
 cuencia de sus años de trabajo y exposición a la biomasa (humo de leña),   llegue en la tarde al centro, lo cual era poco probable, era como tener
               en las manos una caja de mascarillas quirúrgicas en menos de cincuenta
               dólares, es decir, difícil de obtener.
 3 Declaraciones referente al primer caso confirmado de Covid-19 en Ecuador
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