Page 332 - La importancia de las plantas medicinales
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Contribuciones de la biodiversidad
             al bienestar humano y la autonomía


             presentante por tribu, el marichuna o médico espiritista y el lawichu´ra´aru o
             médico por conjuros ancestrales; también se mencionan los tepa kachina o
             hierbateros, personas generalmente mayores que conocen el uso de las
             plantas curativas; y de otros sabedores que participan de los rituales  y en la

             recreación de mitos: como yalejaru, quien canta y baila en los rituales
             curativos, como puñepuchaje, encargado de cantar los discursos tradicionales o
             historias que preceden los rituales, y como yukurú, quien explica los mitos a
             niños y jóvenes en el mambeadero. Entre los upichía (matapí) solo ha existido

             un marichu o médico espiritista, fue Camari, primer ser humano de esta tribu,
             quien no tuvo padre ni madre; se dice que sus hijos no recibieron este
             conocimiento como herencia, por lo que no se dio continuidad al espiritismo en
             este grupo humano. Los marichuna se relacionan con jaguares, serpientes, boas
             y otros dueños del mundo acuático; su pensamiento pue- de transformarles en

             animales como murciélagos. El marichu acostumbra realizar recorridos por
             senderos espirituales, en los que encuentra las plantas más apropiadas para
             curar las enfermedades que presenta la tribu, en esta travesía reconoce las
             plantas que tienen la energía más adecuada para curar, las que deben ser

             utilizadas para tratar cada situación en particular. El lawichu´ra´aru es el
             practicante de medicina upichía (matapí) que contacta la realidad inmaterial y
             con ella pacta acuerdos para asegurar la salud de su tribu y territorio; esto a
             través de conjuros en un dialecto primigenio proveniente del primer mundo.

             Es un conocimiento que se hereda, de padre a hijo, generalmente a un solo
             hijo, al menor o al del medio, en remembranza de Camari, quien tuvo un hijo
             mayor que no pudo aprender por ser mordido por una serpiente, por lo que
             heredó otro hijo llamado Poya, este se afilió a la tribu yukuna por alianza

             matrimonial y tuvo un hijo llamado Pewami, a quien transmitió el saber
             lawichu, luego vino Imariyú, posteriormente Papukúa, luego Wai Namiri y por
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