Page 248 - Velasco y la independencia nacional

VELASCO Y LA INDEPENDENCIA NACIONAL • La RevoLución continúa
aquel periodo, luego de que durante varios lustros y cuando menos en determinados círculos, hubiera prevalecido una narrativa que execraba y descalificaba sin más al proyecto velasquista.
Producto de esta extendida indisposición, empeñosamen- te cultivada, al General Velasco se le ha atribuido maldades gruesas y categóricas, como aquella especie de que el Perú “retrocedió” varias décadas con su gobierno. Una auténtica leyenda negra. Retroceso con respecto a qué, valdría la pena preguntarse, si acaso con relación al espectáculo de los ga- monales cargados en andas por “sus” indios, a las cárceles privadas de algunas haciendas o a las mutilaciones puniti- vas que contra los campesinos perpetraban los “patrones” en su interior. O tal vez a la entraña rentista del Estado, ca- talizada en sus días por el carnaval guanero, a la desarticu- lación productiva y sus enclaves, o a la inserción primaria, altamente dependiente y vulnerable de nuestra economía al capitalismo mundial. O quizá al diligente manejo de los asuntos nacionales, bastante bien ilustrado por aquello de la página once2. La rejuvenecida animosidad de ciertos co- mentaristas ha llegado incluso al tópico desconcertante de acusar al gobierno de Velasco de ser responsable de la in- troducción de las lógicas más extremas del mercado en el ámbito cultural.3 Por todo ello resulta interesante que se pro- duzcan, como ya se ha dicho, intentos más equilibrados de aproximación a la experiencia del gobierno militar del 68-75, y que estos tengan además difusión y audiencia. Un debate que parecía clausurado por mera imposición ideológica –el
2 Se hace referencia aquí a la celebérrima “desaparición” de la página 11 del contrato entre la Empresa Petrolera Fiscal (EPF) y la International Petroleum Company (IPC), ocurrida en 1968.
3 “La revolución velasquista [...] no solo no logró mayor igualdad entre peruanos y peruanas, sino que principalmente permitió que la ideología dominante, que prioriza el libre mercado sobre todas las cosas, idee, extienda y actúe sola a partir de la construcción de mitologías que son repetidas en los copados espacios disponibles de las industrias culturales peruanas.” (Sánchez, 2020:20)
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