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BLOQUE COMÚN NIVEL 3 – Factores psicosociales del alto rendimiento
Tema 2 – El entorno deportivo y su influencia en el alto rendimiento
Además, el propio deporte de élite puede resultar muy “desestabilizador” emocionalmente. Los resultados deportivos pueden generar mucha presión sobre las personas que viven del deporte.
Del resultado en una gran competición pueden depender los fondos económicos que dicha persona tendrá los próximos meses o años. Esto puede generar una presión extra que solo una persona con una buena estabilidad emocional va a ser capaz de soportar.
El reconocimiento social: El reconocimiento social va a variar de unos deportes a otros. En todos va a existir un factor de reconocimiento. Cuando una persona destaca en un deporte, las personas que practican y siguen ese deporte van a tenerla como referencia. Si el seguimiento del deporte es minoritario, el número de personas sobre las que va a ocurrir esto será pequeño, con lo que la persona va a mantener un cierto anonimato.
Sin embargo, si el deporte es seguido por muchas personas, además, la persona va a obtener reconocimiento a nivel nacional o internacional. Este condicionante va a implicar que la repercusión de sus actos sea mucho mayor. Hay deportistas que les encantan la fama y el éxito. En otros casos, simplemente se acostumbran a vivir con ello, mientras que en otros, lo viven con disgusto (por la pérdida de anonimato).
Perspectiva de futuro: La vida deportiva de élite tiene una caducidad. En la gran mayoría de deportes esta suele llegar, como mucho, cuando la persona tiene 30-40 años. Además, en muchos deportes, los ingresos que se obtienen por ejercer la profesión son bajos. En muchas ocasiones, no sirven ni siquiera para subsistir, a pesar de encontrarse en el máximo nivel deportivo de su modalidad. Esta falta de recursos, unido a que la vida deportiva suele ser corta, puede desembocar en un abandono de la misma.