Page 16 - TD1_PA_T4
P. 16
Primeros Auxilios. Tema 4
Cada integrante del equipo deberá poner especial énfasis en ser optimista para motivar al conjunto del equipo, en tener iniciativa y autodeterminación para emprender las tareas sin olvidar la noción de equipo y el rol de los compañeros. Será también importante tratar de ser autocríticos con nuestro trabajo y desempeño, así como hacer críticas constructivas en lugar de destructivas a nuestros compañeros y aceptar sus críticas o puntualizaciones. Los desacuerdos serán considerados como una oportunidad de mejora y crecimiento. En ocasiones será recomendable establecer roles de forma directa en relación a una disposición de ayuda o conocimientos para poder coordinarse y evitar errores (ej. que alguien dirija o coordine las tareas).
AUTOCUIDADOS
Ya sea como Técnico Deportivo como socorristas, adquirimos la responsabilidad de realizar la prevención de los riesgos, la seguridad, el socorro y el cuidado de personas. Cuidarnos y formarnos permanentemente será esencial para ser unos buenos profesionales y hacer que todo aquel espacio del que somos responsables sea óptimo.
Antes de cualquier intervención deberemos prepararnos para las tareas que tendremos que realizar. Es importante que estemos bien formados, que no dejemos de estudiar ni de dar respuesta a las inquietudes que nos surjan en todo lo concerniente al socorrismo.
Cuando se produzca una situación grave en la cual tengamos que intervenir, nos resultará de mucha ayuda definir bien la situación y nuestros objetivos, de forma que podamos poner en marcha las habilidades necesarias. Además, tendremos que reconocer nuestras propias emociones, el estrés que podamos tener por nuestra vida personal así como la identificación con posibles situaciones para regularlas. Si trabajamos con un equipo será imprescindible que podamos comunicarnos con él y ser honestos con nosotros mismos y el equipo cuando sintamos la necesidad de delegar por encontrarnos sobrepasados.
La frustración o la culpa por no poder solucionar el sufrimiento de otras personas pueden abordarnos, pero debemos recordar que las necesidades de esas personas pueden en ocasiones sobrepasar nuestras capacidades. No debemos castigarnos a nosotros mismos por las limitaciones de nuestras intervenciones. Será importante reconocer signos del estrés en nosotros. Para ello nos puede ayudar pensar en el modo en que otras veces hemos afrontado el estrés, pues serán nuestras propias estrategias las que mejor nos ayuden a gestionarlo o afrontarlo. Hablar con nuestros compañeros acerca de cómo han vivido ellos el suceso puede sernos de gran ayuda, compartir las experiencias y emociones. También puede ayudarnos descansar y reflexionar sobre lo ocurrido hablando con personas de nuestra confianza (familiares, amigos...)
Además, llevar hábitos saludables de alimentación y de sueño nos ayudará a enfrentar mejor las situaciones. Así como tomarnos el tiempo de cuidar de nosotros mismos cada día y aprender algunas técnicas de relajación. Sin embargo, si tras un suceso crítico el malestar psicológico perdurase, nos sintiésemos muy nerviosos o decaídos, sobresaltados por recuerdos y pensamientos negativos del suceso, o tuviésemos problemas para descansar o desconectar, sería muy recomendable que buscásemos el apoyo de un profesional de la salud mental que nos ayude a tratar, elaborar y gestionar nuestra experiencia.
Berta Pinilla Santos /Jorge Sances Criado
16