Page 5 - TEMA 4 ORIENTACIONES METODOLOGICAS DEL DEPORTE ADAPTADO
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Deporte adaptado y Discapacidad. Tema 4 – Orientaciones metodológicas
 Justificación de las adaptaciones en Juegos y deportes
Adaptar un juego o un deporte a las características personales de algunos alumnos que presentan algún tipo de discapacidad es facilitar, hacer accesible su participación en las actividades.
Cuando la patología del deportista en sus parámetros físicos, psíquicos o sensoriales no es muy significativo, cabe plantear algunas adaptaciones que le permiten participar en los juegos y deportes en los que, también, participan el resto de sus compañeros.
Un análisis exhaustivo de las características personales de los participantes a quien va dirigida la actividad, así como de las condiciones del entorno, de los materiales y recursos disponibles, es condición sine qua non para poder ofrecer a las personas con discapacidad la posibilidad de hacer deporte y participar en los mismos juegos que el resto de sus compañeros.
El participante con discapacidad necesita, como cualquier otro, sentirse útil y aceptado para participar en aquellas actividades jugadas y deportivas en las que participan los demás; y, además, necesita sentir que progresa y que mejoran sus competencias personales, lo que le va a reportar no pocas sensaciones de bienestar y placer por los logros conseguidos.
4.2. CONSIDERACIONES PREVIAS EN TORNO AL ALUMNADO CON DISCAPACIDAD
En el abordaje de una planificación de actividades físico-deportivas con grupos de deportistas entre los que se incluyan algunos que presentan alguna patología, ya sea motora, psíquica o sensorial, hay que partir del conocimiento lo más ajustado posible de las necesidades que estos plantean. Solo así se puede ofrecer un programa de actividades y una metodología coherente que dé respuesta a la diversidad de los participantes.
4.2.1. Deportistas con discapacidad motora
Los deportistas que presentan una discapacidad a causa de una malformación, lesión orgánica, traumatismo, accidente cerebro-vascular, parálisis cerebral, espina bífida, amputación, etc, pueden presentar distintas posibilidades de movilidad, equilibrio, coordinación... Ello va a depender no sólo del tipo de lesión o enfermedad sino, además, de la edad, grado de atención, posibles complicaciones, si utiliza prótesis, silla de ruedas, muletas, corsés, etc.
Los deportistas con espina bífida, es decir, que presentan un defecto congénito en la columna vertebral, que hace que el canal vertebral no cierre adecuadamente, presentan, en general, una acusada inestabilidad de la cadera. Además, se pueden observar problemas funcionales que inciden en una menor capacidad de resistencia, de fuerza, de equilibrio, etc.
En el ámbito de las anomalías adquiridas, es decir, aquellas que se producen después del nacimiento y guardan relación con factores externos, nos encontramos deportistas con amputaciones, ya sea a causa de algún tipo de separación traumática (accidentes, cirugía, etc.) o espontánea de algún miembro, segmento o parte saliente del cuerpo. También, se puede observar algún caso de poliomielitis, que es una enfermedad infecciosa aguda, producida por un polivirus que afecta al sistema nervioso y que produce parálisis mayores en las extremidades inferiores y en los músculos proximales.
   






















































































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