Page 4 - TEMA 7 PROGRAMAS DEPORTIVOS PARA DISCAPACITADOS INTELECTUALES
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Deporte adaptado y Discapacidad. Tema 7 – Discapacitados intelectuales
Como la aceptación social es tan importante, uno de los objetivos del programa deportivo debe ser desarrollar la conducta deseable a través de actitudes como el autocontrol, la cortesía, la lealtad, la consideración hacia los demás, el respeto y la cooperación. Estas características promocionan la deportividad y una relación más armónica con los amigos. Por medio de la participación en los deportes, un individuo alcanza un mejor entendimiento de la naturaleza de un deporte en particular y de sus normas. Esto le ayuda a disfrutar aún más de la integración con su familia y sus amigos, cuando asiste a los acontecimientos deportivos o los ve por televisión.
El éxito social también se aprende, así que cuantas más oportunidades para la interacción haya, mayor será la capacidad de lograrlo. Los programas deportivos ofrecen una emoción y una diversión que pueden ser compartidos con los compañeros, así como la satisfacción de los premios personales y sociales
Los premios:
Todos nosotros necesitamos un refuerzo de una manera u otra, y la mayoría de la gente lo recibe a diario y lo dan por supuesto. ¿Cuántas veces le han dicho «qué guapa está hoy»? La necesidad de reconocimiento para las personas con discapacidad intelectual es crucial, pues han recibido muy poco. Cuando hace algo mejor de lo que nunca lo ha hecho, elógialo. La amabilidad y el reconocimiento le animarán a esforzarse más y a renunciar menos.
La alabanza y las recompensas deben ganarse, pero no darse tan libremente que pierdan su significado. Un deportista debe entender claramente cuáles son sus esperanzas y la correlación entre logro y recompensa. Esto le ayudará a entender el significado de establecer y obtener las metas y el esfuerzo motivará la participación en el futuro.
Las recompensas pueden darse de varias maneras y todas son igualmente eficaces. Por ejemplo: un golpecito en la espalda diciendo sinceramente «bien hecho», un abrazo, una cinta, una medalla y hasta una sonrisa cálida, hacen que uno se sienta bien consigo mismo. La ilusión de correr en una pista y oír el clamor de la multitud o dar el gol que gana el partido, o meter un balón en la canasta de baloncesto, son victorias que sólo pueden ser experimentadas por medio de los deportes.
Otra forma de recompensa, que se obtiene a través de los deportes, es valorada por el deportista tanto como por la familia. Todos los padres esperan tener un hijo sano y normal. Por medio de los deportes los padres empiezan a mirar más allá de la discapacidad. Ellos tienen las oportunidades para encontrarse con otros padres de niños con discapacidad y contrastar sus problemas y sus logros. Se desarrolla una perspectiva más realista del futuro y se descubren nuevos sueños.
En conclusión, la filosofía y las metas son simples. Siguen la teoría de que todos tienen unas necesidades humanas básicas, de crecimiento físico, emocional y social, que pueden ser cubiertas por medio de la participación en deportes. El reto está en asumir el compromiso de proporcionar oportunidades para toda la gente, sin restricciones basadas en lo que nosotros determinamos que deben ser sus capacidades. Nuestro trabajo como técnicos deportivos consiste en poner a su disposición esas oportunidades, en descubrir su capacidad y conducirles en la dirección correcta, para dejar entonces a los participantes descubrir y desarrollar su propia potencia en el nivel más alto de superación.