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el Señor abrió el mar por el cual Faraón no debía pasar, él se

                  obstinó  y  entró  y  al  entrar  el  mar  se  cerró".  (Página  33  Un

                  pentecostés  en  el  siglo  XX.  Yo  escuché  de  mi  padre  una

                  historia parecida).


                         Estas historias se han pasado de padres a hijos, y tienen
                  cientos  de  años,  ¿Cómo  podían  conocer  estar  historias,  si  la

                  lectura de la Biblia estaba prohibida por la Iglesia Católica?





                             LEYENDAS DE GITANOS DE BULGARIA


                                                    Deyan Kolev


                                       CRUZANDO EL MAR ROJO


                         “Rey Darij era el rey de los gitanos. Él vivió años atrás, en

                  los viejos tiempos, cuando la gente se peleaban entre sí. Rey
                  Darij  decidió  llevar  los  gitanos  a  un  lugar  seguro  para  evitar

                  convertirse en víctimas inocentes. Por esa razón, se acercaron

                  al Mar Rojo. Tuvieron miedo ante la inmensidad infinita del

                  océano, sin saber qué hacer. Entonces Darij invoca a Dios: Por
                  favor,  Señor,  ayúdanos  a  cruzar  el  mar!  Dios  escuchó  su

                  súplica y abrió un camino a través del mar. Todo el mundo

                  estaba sorprendido por este milagro! Darij dijo a la gente, con

                  el orgullo por lo propio de un rey; Voy a ser el primero en

                  cruzar!  Dios  nos  va  a  seguir!  Al  oír  esto,  Dios  se  enfureció.
                  Cuando Darij y sus jefes llegaron a la mitad del mar, Dios se

                  unió a [las paredes de agua en] a ambos lados de nuevo. Como

                  resultado,  Darij  y  sus  jefes  fueron  ahogados  y  los  gitanos  se

                  dispersaron  por  todas  partes.  Por  su  desobediencia,  Dios

                  condenó a ellos a no tener nunca un estado propio, ni un rey.”
                  Hay  muchas  más  historias,  pero  creo  que  queda

                  suficientemente  probado  que  los  gitanos  siempre  estuvieron

                  convencidos que venían de Egipto.


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