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transformado a este pueblo, pues Dios se manifestó a ellos y

sucedieron cosas que solo el todopoderoso puede hacerlo.
Cuando los gitanos conocimos a Yeshua (Jesús) como nuestro

salvador, no sólo Dios hizo milagros de sanidades, liberaciones

de espíritus inmundos, sino el mayor milagro, que era el

perdonarse unos a otros; hubo quienes perdonaron a los que

mataron a su padre o familiares, esto sólo lo puede hacer Dios.

Ahora el perdonar no significa que no debo cuidarme de
aquellos que me hicieron mal, significa no odiar, pero si

alguien me quiere hacer mal, no le deseo el mal, pero me

aparto de él. Jesús lo dijo: “Cuando os persigan en esta ciudad,

huid a la otra; porque de cierto os digo, que no acabaréis de

recorrer todas las ciudades de Israel, antes que venga el Hijo
del Hombre. Mateo 10:23.

Aquí observamos que Jesús dice, que si te persiguen en una

ciudad, vete a otra, esto es no permanecer al lado del que te

quiere hacer daño. Y también dijo: “Pero yo os digo: Amad a

vuestros enemigos, bendecid a los que os maldicen, haced bien
a los que os aborrecen, y orad por los que os ultrajan y os

persiguen;” Mateo 5:44. Esto significa no guardar rencor, odio,

no pagar mal por mal, pero si me sigues haciendo daño, no

debo estar a tu lado. Así, según Mateo 10:23 es como si dijera:

Si sabes que te van hacer daño, no te quedes quieto, vete
donde no te persigan.

En esta segunda parte más bien hablamos de los genocidios

sufridos en España, porque aparte de Alemania, España ha

sido el país donde más dura ha sido la persecución, y la que
más ha durado en el tiempo.

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