Page 541 - JUNIO 2024
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Hoy no quiero hablar de distancias, de esas que sabemos demasiado como 11
son y lo que se siente con ellas... Hoy quiero hablarte de amor, de esa clase
de amor que no nace un día cualquiera, sino que se va formando con el
tiempo. Ese amor que sentimos nosotros y que tanto bien nos hace...
Cuando escribo estas cartas para ti es como que yo me libero de mí misma,
me recorre un deseo imperioso de decirte muchas cosas que, aunque suenen
o parezcan repetitivas, son las que guardo siempre para ti.
Siempre te encuentro cuando el sol se levanta y me asomo por mi ventana
pronunciando tu nombre.
Hoy no se parece a nada de lo de ayer, hoy es todo más fantasioso, hoy
juego con mis manos queriendo encontrar las tuyas a mi lado... pero no es
así, estamos lejos, y todo el tiempo que no estoy contigo lo paso
escribiendo mil cosas para enviarte y que puedas sentir en tu corazón que
cada día es una nueva esperanza para los dos.
Me faltas durante muchas estaciones, con tu ausencia siento tiempo de
lunas sin mucho brillo, y primaveras que parecen otoños. Mas tú eres
interminable, y nunca cambias, eres perenne como la hierba, real como el
sol, amado y soñado por este corazón que sólo ve a través de ti.
Estás lejos, por ahora sólo te puedo enviarte letras como estas, para
sentirnos cerca... pero cuando llegue el día que tanto hemos soñado,
despertaré en tus brazos sin querer soltarte. Mi amanecer tendrá nuevos
brillos y nunca el sol habrá sido más cálido, ni el día más bello, eso será
cuando un día me despierte a tu lado y tomando tus manos, té diré cuanto
te cielo.
Hoy sólo quiero darte amor y bellas palabras, mientras sigo soñando con
estar tan cerca de ti como para susurrare las palabras que aún guardo aquí
en mi interior, y que sólo son para ti.
No olvides que el tiempo pasa y todo será como lo hemos soñado. Un día
todo esto por lo que estamos pasando por culpa de la lejanía no será más
que un hermoso recuerdo que guardaremos para cuando seamos viejos.
Será entonces cuando juntos leamos todas estas cartas que nos enviamos
el uno al otro. Nos tomaremos las manos y daremos gracias a Dios por
este hermoso amor que no regaló.