Page 149 - JULIO
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Los días pasan, los meses y hasta los años, pero esta llama de amor, no se                  23
                  apagará jamás, porque esta llama de amor, me dio la vida y aún mucho

                  más.

                  No seré escritor, ni poeta, pero escribo lo que siento, vivo para contar de
                  este amor, vivo para decir, que, por ti,


                  POR TI, YO MUERO.

                  Quiero que sepan el nombre de este ser tan maravilloso, de este angelito
                  que con su ternura y amor logró conquistar mi corazón, y que no puedo

                  dejar de repetir una y mil millones de veces TE CIELO.

                  Mi amor, aunque la distancia nos separe, puedo sentirte cerca de mí, no
                  lloro de tristeza, sino que lloro de felicidad porque Dios me hizo el regalo

                  más hermoso al bajarte del cielo para estar junto a mí.

                  Es  verdad  que  te  necesito,  pero  esta  noche  Dios  me  dijo  que  pronto
                  estaremos juntos.


                  TE  CIELO  CON  TODAS  MIS  FUERZAS,  y  quise  que  todos
                  conozcan nuestro este amor, este amor que es único y especial.

                  Gracias te doy por estar a mi lado y por luchar cada día por mí.


                  Sólo por ti

                  Sólo  por  ti  esta  noche  me  siento  a  escribir  letras  sueltas  que,  como
                  rompecabezas de mil formas, intentan desgranar el sentir de un corazón

                  que cada día vive en un universo más modificado.

                  Un corazón que late desenfrenadamente y quiere salirse del pecho para
                  correr junto al tuyo y estar cada hora, cada minuto, cada segundo más

                  cerca, transmitiéndote los calores que abrazan mi alma y me hacen sentir
                  que mi vida sólo tiene sentido si tú formas parte de ella.

                  El amor llegó, tú has sembrado su semilla en mi pecho de la que poco a

                  poco va surgiendo un árbol que cada día es más fuerte, con raíces sólidas
                  que se aferran al suelo que pisan tus pies.


                  Todos mis senderos conducen a ti y es que por ti mi cuerpo se estremece
                  como nunca antes creí que pudiera hacerlo.
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