Page 1763 - JULIO
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Que  el  fuego  del  amor  nos  consuma  lenta  y  dulcemente,  mi  cielo,                  9
                  porque eres el fuego que domina mis sentidos.

                  Provocas en mí un deseo inexplicable, me haces perder la razón… me
                  vuelves loco, mi amor.


                  Me sabes indefenso entre tus brazos… sabes que me erizas de pies a
                  cabeza.

                  El deseo entre nosotros asusta. Juntos nos fundimos, somos uno solo,
                  conoces mis deseos y yo los tuyos, liberas mi alma… sublime y tibia

                  conexión…

                  ¡Amémonos sin medida! Nuestros gemidos estremecerán la Tierra.

                  Ven, siente, escucha, vibra, acaricia… enciende y lléname despacio el
                  alma  de  deseo.  Eres  la  enredadera  de  amor  que  me  guía  por  los
                  caminos de densa bruma llenando mi corazón de alegría… lo cobijas,

                  lo  inquietas,  lo  mimas  al  contacto  de  tus  manos  y  tus  labios  que
                  parecen  serpentinas  de  colores  subiendo  y  bajando  sobre  mi  piel,
                  cuando besas mi cuerpo sediento que te complace en la entrega…

                  Ven, amor, escucha mi latir, siente mi necesidad de ti, cierra los ojos y

                  bébeme así… Soy tuyo, tuyo hasta el fin, tuyo hasta mi último aliento.

                  Mi Esposa, mi Amiga y mi Amante, siempre tuyo, siempre mía, siempre
                  nuestro. Te cielo mi Begoña.

                  (Tú me haces amarte cada día más)

                  Siempre tuyo… siempre mía… siempre nuestro.


                  Desde mi rincón para ti.

                  Mi amor:

                  Un  día  cualquiera  comencé  hacer  cartas,  esas  cartas  que  parecen
                  eternas, esas palabras que hablan de nosotros, de ti y de mí.


                  Afuera  llueve  y  esta  estación  no  se  parece  a  ninguna  anterior,  es
                  distinta porque ahora estás tú, siempre tú.

                  Ya no me hago preguntas, sólo es agua que borrará las distancias que
                  nos separan, nuestro universo de pronto se oscurece, pero no logra

                  borrar tu presencia, siempre te buscaré, siempre seremos más que dos
                  locos enamorados.
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