Page 810 - JULIO
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Tú que eres la dueña de mis pensamientos, la que me conoce y no 21
me juzga, la que conoce la historia de mi vida, eres mi gran amor.
Tu nombre se enreda entre mis versos y me hace ser mejor persona
cada día.
Tú eres mi amor de verdad y de bondad, aun a pesar de todas mis
cosas me cielas.
Sé muy bien que me cielas, pues lo siento en mi corazón, en el aire y
en todo lo que me rodea, ese amor eres tú, un hermoso amor.
Espero que recibir mis cartas te alegre el día y el corazón, y que todo
lo que te apena se disipe pronto.
Tan sólo piensa que en mí y en lo mucho que te cielo, porque yo hago
lo mismo al sentirme solo: pienso en ti y así todo es más placentero
para mí.
Hasta pronto, amor de mis versos... de mi corazón.
¿QUÉ ME HAS DADO?
Amor mío, ¿qué me has dado que aún en la distancia no puedo dejar
de amarte? Vives en mí cual si fueras un nardo de rosa angelical, que
se ha posado en este corazón que late por ti.
Siento aquí toda tu esencia, que vibra en estas cuatro paredes en las
que me encuentro y te imagino parado en la puerta diciéndome
cuanto me cielas, lágrimas que caen al saberte tan lejos y muy a mi
pesar son solo sueños, que espero algún día se hagan realidad.
¿Qué me has dado que en cada partícula de mi ser vives? Te has
clavado como espina de rosal, si me duele más no quiero sacarte de
mí, ya que eres el veneno que corre desde mi cabeza hasta mis pies,
siendo el antídoto el amor que llevas por dentro.
¿Qué me has dado en este tiempo para no desfallecer por tu amor?
Que en un día como hoy, muy solo me siento, pero al pensarte se me
avivan las fuerzas de seguir adelante, de saber que en algún lugar
del mundo existes tu amándome.
Si pudiera volar iría en tu búsqueda, pero se que hemos roto la
distancia con nuestro amor y sueños, hemos traspasado ese infinito
con las caricias y los besos que nos damos en la imaginación.